De piedra me he quedado al leer las declaraciones que el presidente de la división de relojes de Casio ha hecho a Sale-Gadget esta mañana. Entre otras cosas dice que su smartwatch es un producto todavía "no acabado", que no es lo que quieren hacer y que depender de un smartphone para manejar el reloj no es precisamente la idea que ellos tienen de un reloj inteligente. Más o menos viene a decir que lo han lanzado al mercado "porque es lo que han sacado todos". Es una forma de decir: "si lo quisiéramos hacer, lo hubiéramos hecho, y lo podemos hacer cuando queramos", una demostración de fuerzas de Casio, pero de ningún modo su idea de "reloj inteligente".
No solo han criticado su propio reloj (algo inédito en Casio y asombrosamente llamativo), sino que se han puesto también a criticar el de Apple. Tal es así que el Presidente de la división de relojes de Casio dijo que si Steve Jobs siguiera vivo jamás habrían sacado el Apple Watch tal y como lo conocemos, e incluso que ni siquiera lo hubieran lanzado todavía.