Casio vuelve a la luna. O, por lo menos, esa es su intención. Y es que llevan ya tiempo colaborando con la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA) para el desarrollo de un rover cuya orientación correrá a cargo de la tecnología de comunicación por luz Picalico de Casio. Inicialmente esta tecnología surgió como una manera de enviar mensajes a través de imágenes, pero también se puede utilizar como un medio de orientación. La intención de ambas compañías es poder ofrecer tecnología para un medio autónomo (que puede ser un rover, pero también un robot) fuera de la tierra. Y es que en nuestro planeta se usan sistemas de antenas situadas en edificios, y señales vía GPS, para orientarse, pero obviamente eso es algo que no existe fuera de aquí de manera que conocer la posición en la que nos encontramos es muy difícil en satélites naturales y planetas.
La intención de la JAXA es instalar en la superficie lunar varias fuentes de luz, que tienen la ventaja de no necesitar comunicación alguna ni emitir señales, simplemente iluminar. El rover utilizará sus cámaras con tecnología Picalico para obtener su posición en la superficie lunar usando como referencia los mencionados puntos de luz. De esta manera se evita también el usar comunicaciones con estaciones u orbitadores en el espacio.