La oficina de patentes de Estados Unidos acaba de publicar la correspondiente al
GWF-D1000, el Frogman de G-Shock. Es cierto que, fuera de los aficionados incondicionales a G-Shock, especialmente a sus digitales, o a los aficionados a la electrónica digital de relojería, el interés de esta publicación no es mucho, pero tratándose de un modelo que despierta tantas pasiones como es el nuevo Frogman no podíamos dejar de ofrecérosla.
La publicación de la patente, aunque con fecha de últimos de agosto, apareció para su disposición a la consulta pública hace pocos días. Hay que agradecerle también a la oficina de patentes de los Estados Unidos la facilidad para que todo interesado pueda acceder a este tipo de documentación (para algunos nos resulta sumamente útil), algo que, por desgracia, no se puede decir de las oficinas de patentes de otros lugares, entre ellos la europea. Y es que aún le queda mucho que aprender -y un largo camino por recorrer- a la Administración europea para llegar al nivel de la de USA, es curioso que, con la cantidad de dinero público que en ella se derrocha, en Europa aún estemos a niveles tercermundistas en este tipo de acceso a documentos oficiales, lo que resulta muy vergonzoso dado el ingente número de funcionarios que en Bruselas (y en sus "filiales" en sus países respectivos) trabajan, todos con dinero público que, sin embargo, no revierte en beneficio del contribuyente. Y es lamentable que tengamos que irnos, incluso los propios europeos, a oficinas de patentes en Estados Unidos o Gran Bretaña porque el sistema europeo es, sencillamente, absolutamente inútil (lo poco intuitivo ya ni lo mencionemos).