Galería semanal de relojes Casio (#16)

Obligados por la necesidad y las circunstancias, os traemos una nueva edición de la Galería Semanal de gente "anónima" con relojes Casio en sus muñecas, que es ya la edición 16. Hubiéramos querido añadir más, al estilo de "las interminables galerías" que solemos publicar, pero hemos supuesto que son bastante difíciles de seguir y que por su extensión tardan bastante en cargar. La alternativa sería ponerlas en formato "thumbnail" (miniaturas que se agrandan al hacer click), pero sabemos que es incómodo y que la mayoría no las verían todas, por lo que estaríamos subiendo imágenes un poco "a lo tonto".

De manera que creo que, lo mejor, es un término medio, y no rozar (o pasarnos a veces) de las cien imágenes, como hacíamos antes. Este número más reducido seguro que es más "digerible" por todos nuestros habituales lectores.

La bonita historia de Arnau Calaff y su W-59 de Casio

Arnau Calaff es un joven relojero catalán que viste, habitualmente, relojes Casio. Entre sus pertenencias tiene un W-59 personalizado con una correa tipo nato. Cuenta que, cuando él tenía 10 años, su padre (también relojero) intentó con todas sus fuerzas que aprendiese a leer la hora, algo que -según explica el propio Arnau- en catalán es muy difícil. Su padre siempre le compraba relojes analógicos y se sentaba a su lado para intentar enseñarle, hasta que acabó dándose por vencido y, prescindiendo de los analógicos, le regaló un digital (donde leer las horas es mucho más sencillo e intuitivo).

El reloj que le llevó como regalo a su hijo fue un Casio W-59, un reloj que le acompañó durante dos años en su aprendizaje horario. Con el W-59 no solo aprendió la hora, sino que aprendió también a descubrir lo esencial que es tener un reloj, e incluso va más allá: dice que sin el W-59 tal vez nunca hubiera elegido la opción de ser relojero (desde julio de 1989 trabaja en MGV, el Servicio Técnico Oficial de Casio en España).

Imágenes de las últimas novedades de G-Shock

A falta de especificaciones, que están por determinar, y de sus presentaciones oficiales, ya os podemos adelantar al menos las imágenes a una resolución bastante más decente de la que teníamos hasta ahora. Especialmente interesante de ver son los nuevos DW-5900 que, como os adelantábamos en ZonaCasio hace semanas, su parecido con el original será eso, "parecido", una semejanza para satisfacer a sus clientes ávidos de vintages y de G-Shock legendarios pero que, por desgracia, no están a la altura.

Aún así hay buenas noticias, y es que como ya os contábamos, habrá una versión sin invertir que, además, será la estándar, la DW-5900-1, no adelantada por Casio en el momento de su presentación "a sus medios amigos" (léase "la prensa japonesa"), pero sí filtrada en otras partes de las que en esta publicación nos hicimos eco en su momento.

¿El reloj inteligente de Nowley? (Perdón, de Casio)

Ya hemos visto muchas veces en este mismo blog cómo un gran número de fabricantes copian los diseños de Casio. Parece que, sobre todo en esas marcas llamémosles "low-cost", no tienen muchas ideas propias, o no quieren arriesgar en diseños o, simplemente, quieren imitar lo que no pueden tener. Por eso un gran número de ellos hacen relojes calcados (cuando no falsificaciones en toda regla) de modelos de Casio.

Esto suele ser habitual entre las más insospechadas marcas asiáticas, pero lo que no me esperaba es encontrar a una española como Nowley haciendo lo mismo.

"Abducciones", de Bia Namaran

Tras el éxito de "Resistencia", "El planeta de las tres lunas", y el número uno de Ciencia-Ficción en España y líder en ventas "Las playas de Venus", Bia Namaran continúa con la saga de las emperatrices-náreas con una nueva entrega en forma de relato corto. Se trata de una nueva visión del contacto alienígena cambiando con ello para siempre la vida de todos los pobladores del planeta Tierra..., y especialmente de uno.

En esta ocasión el contacto extraterrestre se produce con los rotren, la civilización robótica surgida de las cenizas de una extinta raza que se vio condenada por la fatalidad y sus propios logros, y cuya tecnología llenará las calles de las ciudades terrestres de pánico y terror. Pero eso no es todo: cuando lanzan sobre los asustados habitantes de la Tierra unos extraños artilugios de escaneo mental, los indefensos humanos sólo pueden elegir una opción: esconderse. Esconderse en los lugares más recónditos que puedan encontrar, o pasarán a ser una pieza más entre los planes para estudiar y conquistar mundos de los entes robóticos.