
Esta vez no ha sido un perfil de Instagram con un community manager aburrido de la vida, sino que lo de usar fotos de royalties parece que es la tónica habitual. Porque ha sido Casio Brasil en su newsletter oficial -es decir, la propia marca- quien lo ha hecho. En esta ocasión para la imagen publicitaria han recurrido a una foto de Vitalik Radko que podemos adquirir en diferentes plataformas de venta de imágenes (como Vista). Lo grave del asunto no es solo que esas personas no estén usando el reloj (el A100 en concreto) que Casio anuncia, no solo eso, decimos, e incluso que además ni siquiera la chica lleve reloj alguno. Lo grave es que el chico lleve un reloj (aquí lo podéis ver) que no es ni siquiera un Casio. No pedimos que sea el mismo que publicitan (que sería lo más lógico, por cierto), pero sí al menos que lleve un Casio.
Al final uno no sabe qué está publicitando en realidad Casio, si su reloj, si el reloj de la otra marca, o si las fotos de Vitalik. Uno no sabe muy bien qué mensajes quieren transmitir anunciando su reloj pero poniendo una imagen que corresponde a otro total y radicalmente distinto. Es algo que mencionamos en muchas otras ocasiones, es como si BMW anunciara sus coches con un conductor al volante de un Renault Twingo, o de un Dacia Sandero, ¿os imagináis la escena? Pues en Casio lo hacen, y se quedan tan panchos. Quizá es que ni ellos confían en su propio producto.