En Italia el sector de las librerías y editores ha presionado al gobierno, y serán de los primeros comercios en abrir durante ese periodo que llaman "de desescalado". En España, las librerías catalanas se han unido para lanzar una celebración de Sant Jordi (época del año donde se regala un libro y es, por lo tanto, uno de sus periodos de mayor venta) virtual, de manera que el público regale ebooks (lo cual es fantástico y demuestra muy bien que el ebook es ese formato tan socorrido y apreciado, que debería disfrutar de más ventajas -entre ellas, un IVA reducido, como disfrutan los libros en papel-), pero no solo eso: han acordado celebrar un Sant Jordi en El Mundo RealTM el 23 de julio, cuando todo esto -ejem...- haya pasado.
Sin embargo es lamentable la posición de las relojerías, no se han unido, cada una va a su aire y a la patronal de ese sector ni se la ve, ni se la espera. Nada que ver con lo que están haciendo en nuestros países vecinos.
En Portugal, por ejemplo, la patronal y asociaciones y empresas de relojeros no han parado de lanzar comunicados, iniciativas y presiones para salvar sus negocios y su sector. Aquí no han hecho nada; nada de nada.
Claro que tampoco se le puede achacar todo esto a ellas. Las marcas de relojería están también "a verlas venir", suponemos que aún en shock y tratando de digerir el panorama al que se enfrentan. Excepto las suizas (Swatch, Frederique Constant...), que han lanzado comunicados, ni Seiko, ni Citizen, ni por supuesto Casio han dicho "esta boca es mía". Lo último que sabemos de Casio respecto a la COVID-19 es un comunicado diciendo que apoyaría con millones de yenes al gobierno chino para paliar los efectos de la pandemia. De eso hace ya semanas.
Diréis que un reloj no es un producto de primera necesidad, ni una correa, ni una sortija... Y estamos de acuerdo, pero entonces, ¿qué hacemos? ¿Nos metemos todos debajo de la cama a echarnos a llorar, y cerramos nuestros negocios? Es en estos momentos más que nunca cuando se necesitan iniciativas, arrimar el hombro y esfuerzos en común. No hacerlo significa que, cuando la pandemia se vaya, acabemos en una esquina remordiéndonos la conciencia por no haber hecho nada, y sin un mendrugo de pan que llevarnos a la boca. ¿O es que alguien espera que los ERTE o la prorrogación de impuestos le vaya a solucionar la papeleta?
Además, si no es un bien de primera necesidad un reloj, tampoco lo es un libro. Por eso precisamente las librerías están hoy cerradas. Pero que hayan conseguido ser las primeras en prestar servicio al público cuando comiencen a reducirse los riesgos de contagio indica algo: unión del colectivo, algo que en relojería no tenemos en España.
No he oído a nadie hablar de celebrar una "temporada de comunión" virtual, habida cuenta que durante estas fechas son de las más "movidas" del año en el sector, que permitiría la venta de stocks online, o lanzar una campaña desde la patronal -que no es caro: escribir unas pocas notas de prensa, enviarlas a los medios y listo- para potenciar el uso del reloj como perfecto sustituto de los móviles, como venimos haciendo aquí, habida cuenta de su facilidad y ventajas a la hora de desinfectarlos.
Pero nada de eso hemos visto.
Claro que tampoco es algo que nos extrañe. Somos muy conscientes de la enorme división del sector relojero español, lo hemos sufrido de primera mano. Una gran mayoría -no todos, por supuesto- de los vendedores son unos pretenciosos, orgullosos y codiciosos (ni siquiera quieren aparecer en medios online, no creen en ellos ni para una entrevista, y ahora que todo tienen que hacerlo online sufren las consecuencias de su falta de preparación e inexperiencia), cada uno tira con su carro para un lado, y así es imposible hacer nada a derechas.
Señores relojeros, dueños de relojerías, joyería, complementos y afines: únanse, despierten, levántense de su modorra. De lo contrario, la realidad les despertará quieran o no, y pagarán en sus carnes la falta de coordinación, previsión, y su total inactividad y nula proactividad, no solo propiciada por esta pandemia, sino lo que es peor: agravada por su mortal indiferencia y su desgana esperando que las cosas se arreglen solas...; o que se las arreglen desde las administraciones públicas. Van listos si esperan eso.
| Redacción: ZonaCasio.com / ZonaCasio.blogspot.com
Por desgracia, la mayoría de las relojerías viven en otro mundo paralelo. Un gran porcentaje estaban ya esperando a jubilarse antes de la aparición del COVID19. De hecho, entre 2018 y 2019 constatamos el cierre de aproximadamente un 20% de nuestra cartera de clientes y la previsión para los siguientes 3 años era de un 30% adicional por una cuestión puramente demográfica. Ahora, el COVID19 ha precipitado todo y muchos hablan de ni siquiera abrir, o de abrir para liquidar. Desde luego no están por la labor de subirse al carro de las nuevas tecnologías. A la mayoría cuando les pedidos un email o el número de móvil te lo niegan porque piensan que con eso les vas a robar no se de qué manera. Luego, cuando les dices que no les puedes dar crédito porque ni si quiera tienes un teléfono que pasar a la aseguradora se echan las manos a la cabeza y te cuestionan porqué desconfías si tienen años en el sector... es decir, desconfías para dar un número de móvil a tu proveedor o un email, pero te quejas de que la aseguradora no autoriza un crédito porque no puede localizarte... Es más, cuando les ofrecemos correas de recambio para Apple Watch nos responde de muy mala manera que eso tendremos que venderlo en las tiendas para móviles porque el Apple Watch no es un reloj... La relojería tradicional no desaparecerá, pero tiene que evolucionar, tiene que volver a estar cerca de sus clientes y ahora los clientes ya no sólo pasean por su calle, también están en las redes sociales. Ya no solo compran en la calle comercial de la localidad, también lo hacen en marketplaces. Ya no preguntan a su vecina por el servicio de tal o cual profesional, se informan viendo opiniones en línea. Nuestro gremio se tiene que adaptar y el COVID19 ha hecho que ese tiempo de adaptación tenga que acortarse dramáticamente.
ResponderEliminarCoincido con Goyo, que además sabe bien de lo que habla. El sector de las relojerías en España tiene un problema generacional. Una vez jubilados los apasionados, ahora están en manos de herederos desmotivados a quienes todo les da un poco igual, o de gente que sólo quiere hacer negocio.
EliminarPoco queda del amor y la profesionalidad de antes, así que el COVID-19, no es más que un catalizador para acrecentar ese problema.
Muchas gracias Goyo. Tu opinión como experto en el sector me parece inestimable, y te agradezco enormemente que des tu punto de vista que, sin duda, es mucho más real al estar en terreno y en primera línea "de batalla". Te agradezco también que hayas tenido la delicadeza de leer el post y dar la cara, algo que no es nada habitual entre proveedores/fabricantes.
EliminarLo del Apple Watch es inasumible, esas cosas son el futuro, esos dispositivos tienen que estar presentes en su relojería (aunque sea como recambios, que podría ser un filón), y negarse a ello es un enorme error. Diría más, Casio ya está teniendo una presencia cada vez mayor en el mundo de los smartwatches, y con la ventaja añadida que, a diferencia de Apple, con Casio sí pueden venderlo en la misma relojería, y vender luego sus múltiples recambios (correas en este caso), aquí hemos visto en varias ocasiones lo bien que les quedan correas a los modelos con Bluetooth de Casio, pero claro, si le dan la espalda a eso, que supondrá el futuro a medio y largo plazo, entonces están poniéndose trabas a un sector ya muy difícil de por sí, por la elevada competencia existente.
Me quedo con tu última frase, que resume lo que está ocurriendo a la perfección: la pandemia lo ha apurado todo, y un proceso que podría ser de unos cuantos años, se acelerará en unos pocos meses. Porque está claro que no volverá a ser lo mismo tras esto, y el mercado online y venta de productos a través de Internet ha llegado para quedarse, indudablemente.
Gracias de nuevo por vuestras opiniones, Goyo y Guti.
Casio terminará vendiendo todo desde su propia Red en Internet. Se acerca el fin de las relojerías... Total, si vas a preguntar y no saben ni de lo que hablan...
ResponderEliminarEs totalmente cierto que el sector de la relojería y joyería esta totalmente dividido y cada uno rema hacia un lado distinto, también es cierto que muchos de estos negocios son de gente que le queda poco para jubilarse y están esperando cumplir la edad para echar el cierre, pero no todo es tan sencillo como parece, la soluciones son bastante complicadas y cada vez más difícil resistir, entre una cosa y otra, muchas marcas ya no quieren que sus productos se vendan en paginas web tipo "amazon" (por nombrar un ejemplo), las mismas empresas están comprando el producto para ver el número de serie del reloj y así poder localizar al vendedor (luego te amenazan con que dejes de vender por esas plataformas o te dejan de vender), eso es porque dicen que no quieren ver sus productos en estas webs porque desprestigian la marca por los elevados descuentos que aplican algunos vendedores.
ResponderEliminarEl problema es que en internet están tiendas de todo el mundo, y claro no es lo mismo tener que mantener una empresa con sus sueldos e impuestos en España que en Tailandia. La empresa de Tailandia necesita facturar un 70-80% menos que una de España para cubrir sus gastos generales. Evidentemente este es el mercado actual.
Luego otra cosa a tener en cuenta es la gran inversión que necesita una joyería/relojería, todos los relojes o joyas que pides al fabricante, si no los vendes te los tienes que quedar, rara vez te hacen algún abono de genero que por lo que sea no se ha vendido.
Entre que de por si el sector no está de moda, la gran inversión necesaria, los riesgos de atraco y el beneficio final.... Pues hace que las siguientes generaciones prefieran trabajar de otra cosa que en esto (solo tenéis que preguntar en cualquier tienda que tengáis confianza con el propietario, si su hijo/a quiere seguir el negocio, veréis la respuesta).
pero entiendo que si te tienes que quedar el genero, lo puedes vender a un precio mucho mas competitivo y rebajado. Lo que no se puede pretender es que un G-shock (por poner algo que conozco) de hace dos o tres temporadas, se venda al mismo precio de entonces e incluso superior.
EliminarEntiendo lo que me dices, te explico una de las últimas que me a pasado en mi negocio, entra un hombre "no digo cliente porque no lo habia visto nunca" y me dice, tienes este mudmaster en stock? Le digo que no pero que si quiere se lo puedo conseguir, precio etiqueta 699€, me dice que vale pero que se lo tengo que dejar al precio que esta en amazon de 459€, un 35% de descuento aprox, le digo, este es el precio que me cuesta el reloj a mi y no puedo estar manteniendo una empresa para no ganar nada de la venta de un reloj, puedo hacerle un 20% para obtener algo de beneficio, aparte de darle la garantía y el servicio post venta adecuado, le explico que si tiene alguna averia yo me encargo de gestionar todo el proceso de mandar al SAT y que todo esto es gratuito para el, creo que no hace falta que te explique como acabo la cosa no?
EliminarLa gente tiene que entender que a nosotros también nos gusta llegar a fin de mes y obtener beneficios, igual que cualquier trabajador que al llegar final de mes obtiene su sueldo.
Es totalmente inviable obtener un beneficio de 30€ por la venta de un reloj de 600€.