
El invierno se acerca a pasos agigantados, es hora de empezar a pensar en tener listos nuestros relojes de armis y guardar convenientemente nuestros modelos de verano. En los relojes de carga solar que vayan a estar guardados estos meses (o que van a estar siendo usados ocultos bajo las mangas de la ropa) es hora de asegurarse su plena carga para que no tengamos que preocuparnos cuando los termómetros marquen en torno a los ceros grados. Así, los dejaremos cargar aprovechando los rayos de sol de estos últimos días de verano durante algunas horas. Tengamos en cuenta que el acumulador no sufre por "exceso" de luz, sino que sufre, sobre todo, si se descarga, de modo que para asegurarnos unos cuantos años de buenas prestaciones cargémoslos cuanto podamos ahora que el sol nos permite hacerlo.
Si eres de las personas que durante el verano utiliza relojes con correa de resina, y en el invierno prefiere la comodidad del armis, es hora entonces de que guardes convenientemente a tu compañero de aventuras durante el periodo estival. Así, deberás asegurarte de limpiar la correa a conciencia con agua y jabón neutro, para mantener su buen aspecto durante estos meses en los que la vas a guardar.