Y hasta tal punto que en el examen de Matemáticas II para la EvAU llegó a decir: "todas las calculadoras, fuera". Al parecer, una de las calculadoras que llevaba una alumna le causó una inusitada animadversión a la profesora, preguntando a la alumna: "¿qué tiene esta calculadora que no tengan todas las demás?".
El espectáculo fue esperpéntico y, por supuesto, ahora los alumnos afectados exigen una compensación por privarles de tan importante elemento para sus exámenes. Unos exámenes que, por cierto, y según cuentan en El Diario, estaban plagados de errores.
Yo la verdad, si estoy en su lugar, y me quitan la calculadora, ya directamente me marcho. O la guardo y saco otra de mi mochila (que siempre suelo llevar dos a esas cosas).
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