Este cambio de horario de invierno (que ocurrió esta noche, atrasando los relojes una hora, así que si no lo has hecho ya sabes) se suponía que iba a ser uno de los últimos (o el penúltimo), puesto que al año próximo, respondiendo al clamor popular, la UE iba a pedir a los estados miembros que eligieran un horario para quedarse siempre en él.
Pero han empezado a surgir voces discordantes, y varios países han solicitado a la UE que se lo piense dos veces. El primero en pedir que se mantengan los dos cambios anuales ha sido Portugal, pero Austria también pidió que necesitan más tiempo, por lo que parece que la fecha se retrasa -de nuevo, y de momento- hasta el año 2021.