Casio estrena extraños nombres para sus "vintage" de Collection

Casio esta actualizando sus páginas oficiales de Collection, dedicando una sección específica a sus modelos "retro", y street diferenciándolos de los "vintage". En los "retro" han colocado lo que antes eran los modelos para mujer LTP y LTH, y para hombre MTH y MTP. Pero lo más llamativo es lo que han hecho con los "vintage", a quienes ahora dedican una sección específica, y que dividen en Iconic ("icónico"), Mini, Round (redondo) y Edgy. El estilo "edgy" es el estilo rockero de toda la vida (imaginaros a Loquillo, pues eso), con unos toques "modernos" y desenfadados; sería algo así como un estilo "rocker" de los ochenta, con un "grunge" y un gótico, es decir: cuero, pantalones ajustados... Podemos encontrar tanto estilos de vestuario (aquí un ejemplo), de maquillaje (aquí) o de peinado (aquí y aquí).

Para Casio, los modelos "edgy" son los B640 y los B650, si miramos en la página italiana, pero si miramos en la española, son también los DB-360, los LTP-E156, e incluso, y por "extrañísimamente extraño" que parezca, el modelo de calculadora DBC-32. Esto es una muestra evidente de que han mezclado un poco "churras con merinas" y no saben muy bien cómo clasificarlos porque, en el fondo, lo que ocurre es que no son clasificables.

Esto es lo que consigue Casio (cuando tanto le criticamos por los raperos)

Un cartel oficial de un sitio de moda como tantos otros que se ven cada noche o cada fin de semana (los populares "flyers"). Pero éste tiene algo diferente: anuncia al popular cantante de reguetón RPM, y para ello usan además la portada de su último disco. ¿Y que ven la cantidad de niñas, niños, chicas y chicos jóvenes que van a verlo en la discoteca, compran sus discos o ven su publicidad en las tiendas y en sitios web oficiales, de fans y extraoficiales? Obviamente ven al cantante. Pero también ven ese imponente G-Shock GW-7900 y probablemente más de uno sienta más atracción por él, que por el propio artista.

Ese "espíritu G" que nos cautiva y nos atrae no es patrimonio solo nuestro, por mucho que digamos quererlo y seguirlo, por mucho que digamos que somos clientes de la marca. Es también patrimonio de esta gente que ha visto en G-Shock no solo un reloj duro, sino con un fuerte carácter, con una gran personalidad y peculiaridad, que lo hacen ser -en toda su vasta extensión y variedad- el elemento distintivo y característico que les falta para dar a entender, y transmitir, eso que intentan hacer ver. Sea ésto lo que sea. Por eso hay tantos modelos para gustos tan diferentes y diversos.

| Redacción: Zona Casio

Los diferentes estilos en relojería (I)

Cuando escuchamos cuestiones de estilos o corrientes estéticas en relojería normalmente solemos fruncir el ceño y mirar con cara rara a quienes nos hablan de ello. Ni somos decoradores, ni diseñadores, por lo que entrar en el mundo de los estilos suele ser algo que no nos incumbe demasiado. Simplemente, nos inclinamos o nos decidimos por un reloj porque nos gusta.

Pero, querámoslo o no, ese carácter que tanto nos gusta de un reloj, eso que muchos no saben explicar y que hace que lo elijamos por encima de otro suele ir acorde con una corriente estética o de pensamiento que alcanza muchos aspectos de nuestra vida. A veces conscientemente, a veces de forma inconsciente, nos sentimos atrapados o atraídos por una estética en particular porque nuestra forma de ser nos hace cercanos a ella, nos hace sentir a gusto. Por lo tanto conocer los diferentes estilos nos permitirá no solo poder hablar con propiedad a la hora de describir un reloj, o tener mejores conocimientos del mismo, sino disfrutar aún más de la rica historia que cuentan y que existe detrás de lo que a simple vista para muchos no es mas que un objeto cotidiano.

Misterios en torno al reloj: El reloj más antiguo del mundo

Con más de tres mil años de antigüedad, este reloj perteneciente a la Edad de Bronce encontrado en Ucrania en el año 2011 es, a día de hoy, el reloj más antiguo de la Tierra. Se trata de una piedra tallada que posee marcas para medir el tiempo mediante un sistema de líneas paralelas, y puede marcar con precisión el tiempo mediante el sol. Este reloj fue creado por la cultura Srubna (o la Srubnaya, no está muy claro cual de las dos, en todo caso es una de las culturas de la Edad de Bronce, que data entre los siglos XII y XIII antes de Cristo) específicamente para ser usado en su latitud, por lo que no funciona correctamente en otras partes del planeta.

El reloj es de tipo analemático, por lo que se debe usar poniéndolo en horizontal, y su escala está ubicada en el perímetro de una elipse. La hora se lee mediante la sombra vertical que se proyecta en unas hoquedades de los bordes. El reloj tiene dos gnomones, uno de ellos controla el tiempo para las horas de la mañana (AM) y de la tarde (PM), mientras que el segundo es un gnomon que se utiliza para el tiempo que transcurre desde el final de la mañana hasta el anochecer, y en este caso se mide el tiempo cada media hora (el primer gnomon lo hace cada hora).

Misterios en torno al reloj: El caso del avión desaparecido

Vamos a iniciar una serie de artículos de misterio o, al menos, con una buena dosis de inquietud que girarán en torno a una serie de casos muy curiosos en donde el reloj será el protagonista, o tendrá un destacado papel. El primero de ellos trata sobre un accidente de aviación, el más grave que ocurría en España hasta entonces, y que tuvo en su momento una gran repercusión a nivel internacional. Todo ello rodeado de un hilo de misterios y en unas causas que aún hoy no han sido aclaradas.

Y es que este no es tema frívolo, ni banal. Fue un gravísimo accidente en el que fallecieron más de cien personas (105 pasajeros y los 7 tripulantes), rodeado del oscurantismo de la época y una más que dudosa e inquietante prisa por parte de las autoridades por borrar todo el rastro del mismo y enterrar los cuerpos de los infortunados viajeros cuanto antes.

Los relojes en las calles

Los que hemos tenido la suerte (o la desgracia) de pasar bastantes años de nuestra vida viviendo en algún pueblo pequeño, normalmente no teníamos la posibilidad de disfrutar de los relojes en nuestro entorno paisajístico. En mi caso no teníamos reloj ni en la torre de la iglesia, y ni siquiera en la estación de trenes, la cual no era más que un simple apeadero.

Cuando, años después, nos trasladamos a la ciudad, los relojes tampoco tenían cabida en nuestro barrio de la periferia. Este elemento estaba destinado únicamente a los barrios más céntricos y ricos. Hubo un proyecto, sin embargo, para la adquisición de relojes de estilo gótico construidos en hierro forjado, que adornaran las esquinas de las mayores avenidas y plazas. Pero los gustos del alcalde eran muy caros: cada unidad costaba la friolera de 6.000 €. Al final el consistorio adquirió un par, que colocaron -y que aún permanecen- en las calles más céntricas, junto a los edificios de más rancio abolengo.

¿Qué son las agujas Plongeur?

Vamos con un poco de cultura "relojeril". En el año 1974 Omega lanzaría al mercado su Seamaster Professional, conocido como el "PloProf" (de "Plongeur Professional"). Fueron cuatro años de arduo trabajo en desarrollo, con numerosas inmersiones en el medio marino, para realizar un reloj de submarinismo profesional. Fue Omega, precisamente, la primera en adoptar este diseño de agujas anchas de gran visibilidad, que tanto encantan a usuarios de todo el mundo en la actualidad, y por ello -y en honor a ese reloj- tomarían la denominación de "agujas Plongeur".

"Plongeur" es un término francés que significa "buzo" (en cualquier diccionario marítimo encontrareis esa definición), lo que expresa claramente para qué estaba pensado el reloj. Las virtudes de estas agujas anchas, en contraposición con las antaño más habituales agujas "de espada" ("Swords"), son evidentes. No sólo ofrecen una mejora notable de la visualización de la hora en condiciones climáticas adversas, sino que, además, y gracias a su gran superficie, se les puede incorporar mayor cantidad de lumen, para que brillen en la oscuridad de forma notable. Otra de las cualidades de su diseño es que se pueden trabajar sus bordes, bien esculpiéndolos, o cambiándoles el color (o ambas cosas a la vez), contrastando con el fondo, índices o números, para ganar en visibilidad y crear un conjunto estéticamente muy armónico y de gran atractivo.