John Oliver, el famoso presentador de Last Week Tonight (HBO), dedicó su último programa semanal a Guantánamo. Mientras denunciaba el enorme costo de mantener abierta una penitenciaría ilegal (445 millones de dólares el último año, lo que supone un coste de 7,29 millones de dólares por prisionero) y los abusos en derechos humanos que en ella se daban, terminó diciendo que, llegado el momento, cualquier residente de los Estados Unidos (o cualquier extranjero que cruce sus fronteras) con un F-91 de Casio podría ser llevado a prisión sin ningún tipo de seguridad legal y negándole todos sus derechos.
En concreto, dijo que a cualquiera que no le gustase a Trump podría acabar teóricamente en Guantánamo, "sólo por tener un mísero Casio, del cual yo también soy propietario, por lo que tenemos que cerrar Guantánamo ahora". Tienes el vídeo (con el minuto exacto del momento) a continuación. No te lo pierdas, el momento en que John Oliver enseña su Casio a millones de estadounidenses (y ya a casi cuatro millones de espectadores en Youtube) es de enmarcar. Es ese tipo de publicidad que es impagable y que deja a Casio en el consciente colectivo por muchos años.