Lo nunca visto: eBay veta los G-Shock fabricados en Corea

El embargo y las restricciones de comercio de productos internacionales, los bloqueos y demás que gobiernos asiáticos y el estadounidense se levantan mutuamente, está llevando a que se produzcan situaciones kafkianas como la que os vamos a contar. Y es que un usuario de eBay decidió poner a la venta su G-Shock DW-5300, un modelo que, como bien sabéis, es vintage y que ya no se fabrica. Pero su sorpresa fue mayúscula cuando este sitio de venta online le anuló el anuncio, y le envió una notificación diciéndole que no podía poner a la venta su reloj porque había sido fabricado en Corea. Pues sí, había sido fabricado en Corea, ¡pero en los años ochenta!

Son varios los países que no permite eBay que se vendan sus productos en su plataforma, como los fabricados en Irán, Siria, Corea del Norte..., pero lo que nos deja boquiabiertos es que esto sea, encima, retroactivo, o sea, que incluya también a productos y artículos que se fabricaron en un contexto temporal y político totalmente diferente, y que ahora estén en manos de usuarios en otros países. Es un despropósito.

Agosto 16: el ocaso digital vs mercado de segunda mano

Los últimos meses nos están constatando la certeza de que Casio está dejando de lado sus relojes digitales, para centrar su estrategia comercial en sus gamas “Premium analógicas”.

Estos meses hemos tenido dos interesantes novedades en su gama puramente digital, que son el retro-calculadora invertido CA-506B-1A y el nuevo FROGMAN GWF-D1000 con profundímetro y brújula de inmersión integrada.

Quienes pujan en eBay, ¿son locos o idiotas?

Que se ponga a tirar la primera piedra quien no lo haya hecho alguna vez. Sí, yo también he comprado alguna cosa en eBay, principalmente al mercado británico por productos que aquí (o al menos en mi región) no se encuentran, como pesos de calibración. Pero en una ocasión decidí irme a por un reloj que, aunque de segunda mano, estaba perfecto y su propietario lo ofrecía a menos de la mitad del precio que tiene en tiendas (el vendedor era español, por cierto). Ya creía que era mío cuando -como suele ocurrir- en el último momento antes de concluir la venta aparece de la nada un nuevo pujador, que seguramente estaba esperando a la última hora, y ofrece un precio mayor que el mío. Estuve tentado de dejar las cosas ahí, pero como el precio seguía siendo, no obstante, interesante, decidí hacer una nueva puja, superando la de mi contrincante. Al momento él superó la mía.

Estuvimos un buen rato así, hasta que decidí parar, pensando: ¿estamos locos o qué? La razón de que yo dejara de pujar y permitiera que el otro se llevara el reloj es que el tipo había superado el precio que tenía ese mismo reloj en tiendas. De hecho, busqué en el mismo eBay aquel día ese modelo y lo encontré a un precio inferior, nuevo, con embalaje y todo. O sea: mi contrincante había pagado por un reloj usado, sin caja ni manual, ¡más de lo que le hubiera costado ese mismo reloj en la tienda a estrenar!