Históricamente, a sus receptores de radio Philips siempre les había denominado con el acrónimo "AE" seguido de un número. Famosos y archiconocidos eran sus populares reproductores radiocasette de finales de los ochenta y principios de los noventa, aquellos robustos e incombustibles AE-2000 que, cual G-Shock, veías en todas partes y eran muy socorridos para amenizar reuniones improvisadas de jóvenes los fines de semana. La gran autonomía de sus pilas, unido a su potente altavoz, posibilitaba también que estuvieran en manos de la gente que se movía mucho. Gracias a su asa incorporada, podíamos llevarlo con nosotros a todas partes. Recuerdo precisamente que un mendigo que pedía limosna por las calles tenía uno de ellos, y lo solía dejar a su lado mientras inquiría la generosidad de los viandantes.
Curiosidades de la vida (y de los nombres que a sus productos les dan las marcas), ahora han vuelto a coincidir dos mismas denominaciones que, aunque ambas son de dispositivos electrónicos, tienen unos usos muy diferentes.
En efecto, se trata del receptor de radio portátil Philips AE-1500, y el reloj digital Casio AE-1500 también. El AE-1500 es uno de los últimos aparatos de radio que quedan "de la vieja escuela", uno de los pocos - ahora suelen ser la mayoría digitales - con sintonización analógica. Además, es un modelo tremendamente espartano en pilas, ya que funciona con dos simples AAA. Con un bonito exterior, su estilo nos recuerda mucho a aquellas viejas radios de los años ochenta, cuando las emisoras estaban disfrutando y viviendo una auténtica revolución con la llegada de la FM y de la llamada "radio musical". El dial estaba saturado de ofertas, mientras que ahora, sobre todo en AM - una banda que por desgracia está cada vez menos valorada -, existen unos huecos, un vacío, tremendo.
El AE-1500 de Philips, en consonancia con su filosofía, ofrece ambas bandas, tanto Onda Media como Frecuencia Modulada, algo que tampoco suele ser ya lo habitual puesto que, la mayoría que escuchan la radio, lo hacen únicamente en FM y recurriendo a sus smartphones o a los servicios de podcasting.
No son, sin embargo, los únicos productos electrónicos con esta denominación. Curiosamente parece un nombre bastante usado, porque por ejemplo tenemos el AE-1500 de Cotek, un cargador/inversor (convertidor), o el filtro para acuarios Jeneca AE-1500.
Volviendo a la radio de Philips, y al contrario de lo que pueda parecer, aún están muy perseguidas y, aunque no es como antes, mucha gente todavía los valora. Una popular tienda de Barcelona muestra que ha vendido diez de ellas en el último mes, lo que da buena cuenta de que hay muchas personas que siguen prefiriendo la radio en un receptor dedicado, tradicional, y con elementos de control físicos y reales, no una simple simulación en forma de carátula como en un móvil.
Sin embargo para nosotros, obviamente, la denominación AE-1500 representa otras cosas. Un reloj con un módulo digital de unas generosas dimensiones en su display, y un formato de segmentos "a la vieja usanza". Quizá el AE-1500 de Casio, como el mismo AE-1500 de Philips, no disfrute de la difusión y popularidad que antaño tenían esos productos, pero que se puedan seguir adquiriendo es ya de por sí un logro digno de reseñar. Eso sí, ¿hasta cuándo? Veremos, porque los nativos digitales cada vez aprecian menos este tipo de cosas. Quizá, claro, porque no las han vivido, y han mamado y sufrido otra tecnología en la cual importa más los colores que lleve, lo chula que resulte, o lo llamativo de sus pantallas, aunque no tenga ninguna utilidad ni sirva para nada.
| Redacción: ZonaCasio.com / ZonaCasio.blogspot.com
Bonita comparativa y bonita colisión de nombres. Lo primero que pensaba es como estos transistores han ido a menos, cómo han pasado de ser algo que todos usábamos a aparatos minoritarios y casi de lujo. Eclipsados por el smartphone, las radios por internet y la FM.
ResponderEliminarPero luego me ha venido a la mente que un poco el AE-1500, un relojazo y el mejor Collection de 2020 en mi opinión, son un poco lo mismo. La tecnología que todos querían, pero que ha quedado eclipasada por los smarts.
Por no terminar con el pesimismo, recuerdo que me encandiló del AE1500 ese LCD enorme y tan legible. Me recordó al de los Suunto Core, pero a 5 veces menos precio. Justo lo que hizo famosa a Casio, sacar cosas muy parecidas a sus competidores, pero a una fracción de su precio.