Durante unos pocos años, a principios del siglo XXI, vieron la luz unas llamativas variaciones o "versiones G" del W-59, que se diferenciaban del modelo estándar por disponer de un marco dorado. Eran, por tanto, las variaciones doradas del W-59, denominadas W-59G-9VQ, con una estética similar a otros modelos con detalles dorados en Casio, como el F-91WG-9.
No estuvieron a la venta muchos años, desde el 2000 hasta el 2004, aproximadamente, y además no eran fáciles de encontrar. Se comercializaban junto con la versión estándar, y añadían una exclusividad extra a un modelo que, durante muchos años (toda la década de los noventa, en realidad) había permanecido prácticamente invariable, con la salvedad del cambio estético de su módulo (retirándole el marco del calendario).