No solo es llamativo este lanzamiento porque incluya el nombre de Swarovski (que ya de por sí sería bastante impactante), ni porque vaya unido a la palabra G-Shock (una mezcla de la cual puede surgir cualquier cosa) sino porque, además, va incluído otro término: MT-G. Si una de las líneas "top" de G-Shock se mezcla con una de las firmas "top" en joyería, os podeis imaginar que el producto resultante es realmente muy digno de reseñar.
Y no estamos hablamos simplemente de uno de esos modelos "tuneados" que pululan por la Red, con G-Shock llenos de pedrerías por su bisel, sino de, como podréis suponer, algo mucho más elaborado. Y el embalaje especial en que G-Shock lo ha preparado nos dice mucho sobre ello. Se trata de un completísimo pack que incluye la cámara compacta Exilim EX-TR350 (esa cuyo marco se mueve y pivota para hacer fotos sobre cualquier superficie), decorada con elementos en Swarovsiki y anillo de la lente en dorado, y que incluye un espejo (también con detalles de cristales auténticos de Swarovski), y un llavero. Y para cerrar el conjunto Casio ha añadido el MT-G S1000D, el último representante de la serie MTG. Pero tranquilos, no lo ha "estropeado" metiéndole pedrería por todos sus rincones, sino que es el mismo modelo que se puede adquirir suelto.
