Sin redes sociales, sin Facebook, Twitter o Whatsapp, incluso sin todavía blogs (lo más cercano eran aquellos populares "rings", anillos de páginas con temática en común), los jóvenes de los noventa experimentaban en sus carnes y vivían en primera persona el surgimiento y popularización de "la Red global", la "Red de redes": Internet.
Y por aquéllos años la WWW era solo una parte de ella. Había otros protocolos que tenían tanta o más popularidad y aceptación. Uno de ellos era el IRC.