Algunas filiales de G-Shock, como la británica, se están esforzando en favorecer los pagos online en estas circunstancias en donde la compra por internet ha alcanzando límites insospechados. Klarna (no disponible aún en España), es uno de esos tantos servicios de "pago retrasado", permite que adquieras tu G-Shock, y lo pagues hasta en 3 meses, sin intereses.
Ahora bien, no todo lo que reluce es oro y, en materia bancaria como podéis suponer, muchísimo menos. Klarna requiere que les permitas realizar una "revisión" de tus finanzas, es decir, asegurarse que realmente tienes dinero suficiente para pagarles. Además, es obligatorio tener una cuenta bancaria "real" en un banco "físico", y una residencia en un país de entre los que ellos consideran "elegibles". Tras un estudio, te pueden permitir adquirir ese reloj -o no, dependiendo del caso-.