El competidor barato del G'zOne se llama Nokia 515

No solemos hablar de telefonía móvil aquí (aunque alguna vez lo hemos hecho), pero en esta ocasión creo que es una de esas veces que conviene hacer un pequeño inciso porque esta novedad puede resultar sumamente interesante para muchos de los usuarios de relojes G-Shock, ya que lleva un poco ese mismo concepto de resistencia a otro de nuestros dispositivos de uso diario: el teléfono móvil (o celular, para nuestros lectores latinoamericanos).

Y es que anteayer Nokia presentó de manera oficial su último móvil, el Nokia 515, cuyo exterior ha sido realizado en aluminio (aluminio fino, Nokia tiene bastante experiencia en recubrimientos metálicos para sus móviles), junto con un display protegido mediante el famoso recubrimiento Gorilla Glass 2, que, como bien sabrás, es resistente "a casi todo". Por si eso fuera poco, ese cristal es polarizado, con dos fines: por una parte, facilitar su lectura en días de sol (las pantallas de Nokia son las que mejor se leen bajo luz solar), y no producir deslumbramiento.



Eso sí, le falta alguna que otra característica para ser un rival duro de verdad frente al G'zOne, como la resistencia al polvo o al agua, pero como móvil "barato" y duradero sin duda es una buena opción. De hecho, su sistema operativo es el S40, así que en cuanto a software las pretensiones no son muchas, pero también esto hará que sea un móvil asequible. Aún a pesar de ser, relativamente, "limitado" (siempre comparándolo con un smartphone), tiene doble SIM (con Easy Swap Dual-SIM, es decir: cambio rápido de tarjeta), y cámara de 5MPx con flash incorporado.


Se pudiera pensar que el añadido de un exterior metálico le hace ser un móvil pesado, pero nada más lejos de la realidad: con unas medidas muy contenidas de 114 x 48 x 11 mm, el 515 pesa solamente 102,7 gr.

Una idea que me ha resultado muy atractiva (y útil) al leer las especificaciones de estos terminales, es precisamente eso: su cristal antireflejos. Más de uno seguramente habreis sufrido con los reflejos de los rayos solares al incidir en el cristal de vuestro G-Shock para ver la hora. La solución de adoptar Gorilla Glass con tratamiento anti-reflectante sería sin duda un punto muy a favor para los G-Shock. El único problema es que en Casio no son muy amigos de utilizar elementos que no fabriquen ellos mismos (de hecho las correas reforzadas, el sistema Alpha-Gel y todo lo demás, lo produce la propia Casio), y no les gusta recurrir a terceros, porque eso te hace depender de cosas que no puedes controlar (y perder, en cierta forma, el dominio total de las fases de producción, aunque en los tiempos que corren eso no debería ser problemático... Apple lo hace y no les va mal). Así que mucho me temo que habrá que esperar a que Casio invente -si es que lo hace- su propio "Gorilla Glass" para disfrutar de algo así.






| Redacción: Zona Casio