Quizá porque G-Shock no estaba teniendo el éxito esperado, Casio decidió intentar popularizar su imagen con un modelo de su línea superventas, la que ahora es conocida como Collection (o "Vintage", últimamente, en otras partes del mundo), pero que por aquel entonces no tenía etiqueta alguna: eran, simplemente, relojes de Casio. Y los más representativos, por cierto.
Tal vez fuera también, en parte, por querer aprovechar el diseño de los G-Shock (quizá era una nueva oportunidad para ofrecer un reloj a medias entre un G-Shock y un Collection), y de ahí que este modelo fuera uno de los pocos en contar con bull-bars de serie, o su resistencia al agua de nada menos que 100 metros (como la mayoría de la serie 7xx, recordemos que esta serie fue la sustituta de los Marlin).