Con el clásico módulo 593 se presentaba en 1989 el F-98. Eran buenos tiempos para estos básicos old-school, el F-91 se vendía a montones y Casio buscaba ofrecer variantes tomando de base ese famoso modelo, aprovechando también el módulo, pero con unos exteriores muy distintos entre sí, buscando satisfacer a gustos de usuarios muy diferentes que buscasen, aun siendo el mismo reloj, un modelo con un exterior fuera de lo habitual. O al menos que no se encontrase cada dos por tres en las muñecas de tus compañeros y amistades habituales.
Una de sus primeras variaciones del F-98 llegaría con el F-98WE-1A de 1992, característica en ella eran las dos franjas amarillas en la parte superior, letras en amarillo, y un diseño oblicuo de la grafía en su correa, inusual en estos modelos, que solía ser recta en vertical. Eso sí, con los habituales colores amarillo, azul y rojo. De hecho, todos los F-98 venían con correas serigrafiadas.