Con seis años de garantía ya tienes Casio para rato

Hace ya algunos años empezó a surgir la moda de darles a los coches tres años de garantía, por lo que algunas marcas decidieron aumentarlo y competir ofreciendo cuatro, luego siete, y hasta algunas llegan a los diez años (para algunos componentes). Por desgracia eso no ha hecho que más marcas se animen, especialmente de tecnología, porque ya sabemos que la mayoría de aparatos de ese tipo (por no decir todos) están hechos para que duren ese mínimo legal imprescindible de dos años, y a partir de ahí su durabilidad comience a descender abruptamente (que se lo digan a mi móvil Samsung, lleno de grietas en la carcasa).

Sin embargo, también es cierto que todos sabemos que los productos de Casio no solo son enormemente competitivos en precio, sino que, además, de una gran calidad y con muy buenos acabados. Y para muestra un botón: Casio en Polonia ha decidido extender su garantía nada menos que hasta los 6 años, el triple del límite legal mínimo, y muy por encima del resto de sus competidores (relojería incluida). Esto supone que algunos modelos de Casio ya habrán agotado su pila útil y aún seguirán en garantía. La verdad es que esto sí es confianza con una marca, y el resto son historias.

Por cierto que en otros dispositivos como proyectores, Casio va también bastante por delante de la competencia: la vida útil es de unos 15 años de duración (vida útil probada), y la garantía cubre 20.000 horas (la competencia suele garantizar solo 4.000 horas).

| Redacción: ZonaCasio.com

Resistencia y duración

Ya veíamos en La verdad sobre G-Shock que en ningún otro sitio te contarán, que los Casio G-Shock, no son en general lo que eran, algo que a muchos no les pillará de sorpresa, y sobre lo que no voy a repetirme.

Si que me gustaría aclarar un par de conceptos, que suelen llevar a confusión. En realidad, no me avergüenza reconocer que personalmente yo los daba como sinónimos, o sea, como que eran equivalentes. Se trata de Resistencia y Duración.

A los hombres les gustan las rubias... Pero se acaban casando con las morenas

Los relojes de resina nos gustan, tienen colores, son muy divertidos... Pero cuando buscamos algo "en serio" acabamos recurriendo tarde o temprano al metal.

Por supuesto, como en casi todo, no se puede generalizar. Hay muchos que se casan con rubias. Pero llevándolo a un símil relojero podríamos decir que muchos de nosotros preferimos modelos de resina, no solo hay más variantes donde elegir sino que, además, suelen ser más ligeros y, sobre todo, más baratos. El único problema es que cuando empiezas a utilizar un reloj de resina ya no hay vuelta atrás: la correa comienza a coger "tu" forma, la caja se desgasta, la resina comienza a brillar debido al pulido constante a la que le somete la ropa, las formas con esquinas en aristas se redondean... Tarde o temprano tu reloj acaba presentando ese aspecto de desgastado. Es normal y comprensible. Forma parte de la vida.

Si te empiezas a dar cuenta de ello y decides parar y guardarlo, la resina de su correa comenzará a presentar ese característico aspecto de exterior blancuzco o negruzco. Y eso si has tenido suerte y la correa no es de un color claro o con una capa brillante de recubrimiento ("glossy"), porque si lo es y te empezó a descascarillar ya no tendrá remedio.