Todos sabemos que el F-91 posee una resistencia superior de la que a priori -y por fortuna- Casio pone en el papel. Sin embargo, una de las piedras de toque que siempre suele crear mucho debate entre los aficionados es su resistencia al agua. Entre los más "puritanos" que defienden que es un "Water Resist" sin más y que no debería someterse a más de unas pocas gotas de agua, y aquellos que aseguran nadar con él, ducharse y demás, sin ningún problema, suele haber intensas discusiones con argumentos a favor y en contra.
A todos ellos debería servirles como ejemplo las muchas "perrerías" que los F-91 han sufrido y frente a las cuales se han mantenido impasibles: enterrados durante años, aplastarlos, arrojarlos al vacío..., incluso freírlos como un huevo y hacer con ellos una tortilla.