En el mundo del coleccionismo hay momentos memorables. Dependen claro está del valor personal de cada uno, de la intensidad con la que viven su afición. Cuando consigues "esa pieza" que te falta, que añoras, los fuegos artificiales se lanzan al cielo. Y es lo que ha sucedido en esta ocasión…
Esta entrada es muy especial para mí ya que tengo el orgullo y el placer de presentar un reloj fantástico y único en el universo del coleccionismo vintage de Casio. Se trata del “Marlin Swimmer” W-30 Fishing Boy en su versión blanca.
Hace unos años conseguí la versión Gris de su hermano Fishing boy, con el cristal algo magullado, pero en todo caso una pieza de un valor único por la exclusividad y rareza del modelo.