De vuelta a los setenta: ¡Los legendarios F-100 reeditados en los nuevos A100!

Reedición brutal y lanzamiento extraordinario para un modelo mítico donde los haya.

Que Casio tenía reservado algo muy, muy emocionante era una sensación que se palpaba en el ambiente, que casi se olía. Sin embargo, jamás podíamos llegar a sospechar, a imaginarnos siquiera, que se trataría de algo tan asombroso. Estos A100 suponen la reedición de uno de los modelos más históricos, míticos y buscados de Casio de todos los tiempos: los F-100. No en vano cuando sale alguno en sitios de segunda mano a la venta, aunque se encuentre en un estado miserable y penoso, su precio suele ser prohibitivo. Y es que los F-100 representan mucho dentro de la historia de Casio en particular, y de los digitales en general.

Por de pronto, fue el primer reloj digital con caja de resina. Hasta entonces estos modelos eran todos de caja de metal (mayoritariamente acero). Curiosamente siguieron la tónica de los automóviles, ya que en los años setenta los coches pasaron de tener muchas de sus piezas que antaño habían sido de metal (defensas/parachoques, molduras, tiradores, retrovisores...), a tenerlos en resina. Fue en esos años donde llegarían al mercado, y se harían populares, modelos de este estilo como los Fiat Ritmo o Renault 5, en donde los anteriores elementos de metal se habían sustituido por resinas, que irían cobrando más y más protagonismo en décadas sucesivas (y a partir de los ochenta prácticamente la resina reemplazaría al metal).




Con la relojería ocurrió otro tanto de lo mismo: los relojes de metal fueron cediendo ante las bondades, ventajas y propiedades de las resinas. Con ellas eran más ligeros, se hacían inmunes al óxido y, además, se logró que producirlos fuera también más barato. Una vez conseguido el molde (muy caro, eso sí), se podían obtener piezas con la misma calidad, e idénticas unas de otras. Y, por si fuera poco, de forma muy rápida.

Casio enseguida le vio su gran potencial, y por ello lanzó en el año 1978 el F-100. Este reloj era tan avanzado a su época que Ridley Scott lo eligió como reloj de dotación para la tripulación de la Nostromo, en su ya película de culto dentro de la escene sci-fy "Alien, el octavo pasajero".



Pero eso, que no es poco, no es todo. Ni mucho menos. El F-100 supuso, además, la transición, el eslabón entre los CasioTron y los posteriores Casio de los ochenta (Marlin, HD, Melody, y por supuesto, G-Shock). De manera que el F-100 no es sólo un modelo histórico en Casio, es un referente de la relojería digital a nivel mundial.

Y Casio, en esta "reedición", lo ha bordado. De verdad que sí. El trabajo que han hecho es bestial, abrumador, incomensurable. En los dossieres de prensa e información técnica que han facilitado a los medios lo explican: han cogido todo del modelo original, todo, las dimensiones, el estilo, la caja... Todo es tal y como lo era en el F-100 de 1978. Pero no se han quedado ahí: aseguran - y se ve claramente que así es - que han tomado la combinación de colores del F-100, su tipografía, el diseño de su carátula frontal, su máscara, y sus pulsadores - que son de metal, no lo olvidemos -, y los han vuelto a hacer reproduciéndola fielmente para incorporarselos a este modelo. ¡Asombroso!



Pero aún siendo esto para quitarse el sombrero, no lo es todo: encima le han programado de nuevo el módulo, así que para estos nuevos A100 el módulo (el 3503 en concreto), como no existía desde los años setenta, se lo han tenido que volver a realizar.

¿El resultado? Pues unos A100 de la serie Vintage Iconic que rinden homenaje de manera brillante a los F-100 de 1978. Todos los amantes de aquellos digitales nos sentimos abrumados y emocionados ante este nuevo modelo. Y no es para menos.



De inicio los A100 llegan en tres variantes, todas ellas con recubrimiento libre de cromo - la caja, como el original, sigue siendo de resina -, con pulsadores de metal - cuatro en el frontal, como el original - y resistente al agua (un simple WR, que es más que el original, por cierto, ya que el F-100 no tenía ninguna resistencia al agua).

Los A100 desprenden sensaciones de la década de los setenta, del mundo Casiotron, por los cuatro costados. El diseño de sus leyendas, los colores "de guía" al lado de sus pulsadores (correspondientes a "Reset", "Mode", "Light" y "Start"), y su cristal con aristas y caja angulosa es tal como solían ser las máquinas digitales de aquella época, las calculadoras, los electrodomésticos..., hasta las consolas de los coches. La verdad es que es brutal que Casio nos ponga esto en las manos, además a unos precios asequibles (y no las exageradas cifras que había que pagar ahora por un F-100 de aquellos que algunos vendedores pedían), y completamente nuevos. Salvando las distancias, es como si se volviera a editar una maquinita de marcianitos de aquellas, como si "Alien" se estrenara hoy en los cines, como si Renault volviera a vender aquel R5 tal como era en los setenta. Como si alguien hubiera viajado en el tiempo y nos lo hubiese traido.



Decíamos que de inicio habrá tres variantes, la plateada, que será la más asequible, se denominará A100WE-1A y costará 50 € (para España). La dorada, una de las más caras, se denominará A100WEG-9A y su precio será de 69 €. Habrá una muy atractiva e interesante variante "gun metal", pero por desgracia será invertida. Se trata de la A100WEGG-1A, y su precio será el mismo que la dorada, es decir, de 69 euros.

Todas ellas llevan armis, y su módulo tiene una huella a la vieja escuela bestial: la hora se visualiza en su pantalla "de una sola línea", y hay que pulsar un botón para ver la fecha. Otro pulsador nos permite ir a la pantalla del cronógrafo. Es decir: olvídate de tenerlo todo por ahí "desperdigado", como nos tiene tan acostumbrados la tecnología de hoy, como los smartwatches o smartphones, en donde la información te viene en pequeñito y alcanza cualquier esquina. Aquí no hay nada de eso. La filosofía de estos modelos en aquellos años era radicalmente distinta. Había que aprovechar muy bien lo poco que había, cada dígito y cada segmento, así que la pantalla, toda ella, TODA, estaba dedicada a una cosa: o a la fecha, o a la alarma, o a la hora, o al cronógrafo. Lo que quieras, pero no todo a la vez. Fenomenal. Esa filosofía hoy se ha perdido casi por completo (quizá algunos modelos como los DW-5900 la mantienen todavía, en parte al menos), por eso estos nuevos A100 son tan únicos, tan memorables, tan especiales. Nos llevan de un tirón, nos trasladan, nos hacen viajar y volar a un tiempo en donde las cosas eran radicalmente diferentes a hoy, donde la tecnología de este tipo asombraba, era prometedora, y ya veis: con solo unos pocos dígitos ahí colocados en un espartano display se conseguían auténticas maravillas, y mucha funcionalidad.



Y era una tecnología, por cierto, sencilla, simple, robusta y fiable, que no te complicaba la vida con cientos de llamadas de atención ni te extrujaba la cabeza. Sabías que esa pantalla era la del cronógrafo, o la de la alarma... Y punto. Y cada sección, como veis, en los F-100/A100 estaba (está, en estos modelos, también) perfectamente estructurada. Fíjate cómo, en la parte superior, "se le enseña" al propietario del reloj, a su usuario en definitiva, lo que hace cada sección de la pantalla en la que se divide: en una zona está la hora, en la central los minutos (se nos dice), y en el otro extremo, los segundos. Lo mismo ocurre con la fecha (mes, día, nombre), o con el cronógrafo.

Estos digitales comenzaban a incorporar conceptos y elementos que luego se harían estándar, como el contador de segundero en un tamaño más pequeño, o la posibilidad de activar un "repique" a cada hora, es decir, la señal horaria.



Pero encima es que, gracias a esta nueva realización de Casio, en los A100 disfrutamos de "sabrosos" elementos que no tendríamos antes con los F-100, y que en los A100 sus poseedores sí van a poder gozar. El principal, cómo no: la iluminación. Ahora es LED y encima con tecnología de reflexión de la luz (Illuminator). Eso nos permitirá extasiarnos aún más con esta auténtica maravilla de reedición.

Los Casio A100 comenzarán a llegar a las tiendas a partir del mes de agosto, y seguro que se convertirán en todo un acontecimiento. Ellos son, sin duda - y con el permiso del GSW-H1000 - una de las estrellas de las novedades de Casio de la temporada, los cuales pasarán a convertirse en el modelo de referencia y preferido en muchas muñecas, tanto de los más fieles e incondicionales de Casio que busquen un reloj con sabor añejo de primer orden, como de los más jóvenes que busquen un modelo retro de verdad, con todas las letras.

Y para terminar, un dato: no pienses que estos A100 es lo último que va a llegar. A ellos les va a acompañar una edición especial que hará las delicias de los aficionados de la Casio más vintage, especialmente de los amantes de la tecnología de los setenta y ochenta y a los videojuegos. Pero eso llegará en pocas semanas, así que no te lo pierdas, porque estamos seguros de que también te va a encantar.



| Redacción: ZonaCasio.com / ZonaCasio.blogspot.com

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