Cuando desde Casio prometian por activa y por pasiva que no iban a hacer un smartwacth con sus G-Shock (mientras en Japón se ponían a fabricarlos)

Para la responsable de relojes de Casio en Argentina, "un G-Shock no podía ser un smartwatch."

Estamos en 2018, no hace tanto, y la responsable de marca de Casio en Argentina, Karina Micciché Saavedra, era entrevistada por Bitwares. Siguiendo las directrices y términos que ya habían mencionado muchas veces desde Japón - en ZonaCasio nos hicimos eco de ello varias veces -, insistía en la incompatibilidad existente entre los relojes G-Shock y su filosofía, con la de los smartwatches. De hecho, la señora Micciché llegaba a decir taxativamente que "la tecnología de los smartwatch es muy frágil e iría en contra al concepto de G-Shock".

Apenas han pasado un par de años, y las cosas han dado un giro de 180 grados. Hasta tal punto que G-Shock no solo tiene smartwatches sino que, con la llegada de Asics recientemente (con los novísimos GSR-H1000AS), se posiciona como la única submarca de Casio con los smartwatches mas avanzados y actualizados. Lo que es lo mismo que decir que, de todo lo que vaticinaban sus ejecutivos no se ha cumplido nada. O se ha cumplido, pero al revés.



De no ser "aptos para las exigencias de un G-Shock", los smartwatches han pasado a convertirse ahora en uno de sus pilares.

Y es que se da la paradoja que, mientras eso aseguraban los más altos ejecutivos, desde las factorías niponas se ponía la maquinaria en marcha para fabricar los smartwatches de G-Shock. En agosto de aquel mismo año de 2018 ya tenían en la FCC los primeros prototipos del GPR-B1000, que se convertiría, a la sazón, en la punta de lanza de los modelos smartwatches para G-Shock. La cuestión es que la documentación la recibió la Comisión de las Comunicaciones estadounidense muchos meses antes, en febrero. El día 5 de marzo, ya tenían en sus manos el cargador para ese reloj (todo lo contrario de lo que explicaba Karina en la entrevista, que decía que "además, los smartwatch tienen el tema de la batería que hay que cargarlos constantemente. Eso no pasa con la línea G-Shock, funcionan a pila o se cargan con la luz del sol, ya que como se utilizan en deportes extremos necesitan mayor tiempo de autonomía"). Hoy varios de los smartwatches de G-Shock se recargan con un cargador "convencional", y poseen una batería de litio "convencional", como otros en el mercado.

Claro que el periodista, muy avispado él, le pregunta entonces que teniendo eso en cuenta entonces, ¿a quién "carajos" se dirige G-Shock? Pues para Karina no hay duda: "todos los G-Shock tienen cronómetro, alarma y hora dual, apretando un botón cambia la hora según el lugar del mundo donde te encuentres". Bueno, partiendo del hecho de que ningún G-Shock tiene cronómetro, ni por supuesto todos tienen hora dual - que se lo digan a los GM-6900, sin ir más lejos -, queda bastante claro que de la línea de G-Shock algunos de los ejecutivos de Casio sacarían un "muy deficiente" en conocimientos de marca.

Como podemos apreciar, el tiempo ha quitado muchas razones y contradicho a casi todos los que nos aseguraban, de fuentes directas de la propia compañía, que G-Shock no entraría en ese terreno. No solo ha entrado, sino que su catálogo cada vez está más saturado de ellos. ¿Incongruencias? ¿Despistes? ¿Estrategia comercia? ¿O simple desconocimiento del asunto? Lo dejamos a vuestra consideración.

| Redacción: ZonaCasio.com / ZonaCasio.blogspot.com

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