Los puntos negros que se le achacan a Casio

Casio es nuestra marca favorita (por algo estamos aquí, ¿verdad?), pero desde hace algunos años a esta famosa marca tecnológica, y concretamente los usuarios de sus relojes, se le achacan una serie de "fallos", "defectos" o "puntos negros" en sus relojes, unas veces por el abuso de determinadas características (por ejemplo, los colores) y otras por la falta de determinados componentes o elementos en su construcción.

Sea por una razón o por otra que obligan a este fabricante a obrar así (en Casio se mueven en unas cifras de beneficios muy escasas, con márgenes que en algunos modelos de Collection rozan las pérdidas, y no hay mas que comparar un módulo Collection y el precio al que lo venden con módulos similares sus competidores), y a veces por la creciente necesidad de renovación de gamas, muchas de estas demandas -a veces tan históricas- de sus usuarios no se han visto satisfechas. Y bien, ¿cuales son esas demandas? Vamos a continuación a hacer un resumen de algunas de ellas.




-Cajas de metal. Casio tiene muchas cajas de metal, de hecho cada mes lanza relojes con cajas de metal de acero inoxidable o latón -principalmente-, pero solo en relojes analógicos. En sus relojes digitales las cajas de metal brillan por su ausencia, siendo los últimos modelos en recibir una caja de este tipo -dejando de lado las ediciones limitadas del 30 aniversario de G-Shock- los de Edifice, concretamente los EFD-1000, EFD-104 y EFD-102.

Por supuesto, quien habla de cajas de metal de acero también lo demanda en titanio. Es una lástima que Casio no ofrezca -aparte de sus Frogman- digitales "puros" en titanio. Tenemos que irnos nada menos que a modelos como los MRG del siglo pasado para encontrar un digital de este estilo, siendo el único lanzamiento de la presente centuria el elitista y exclusivo GW-T5030, del cual solo aparecieron muy pocas unidades a precios de escándalo.

- Más cajas íntegramente en resina. Curiosamente la demanda de cajas de metal no debería obligar a Casio a empezar a fabricar cajas chapadas (lo cual sería terrible) retirando las cajas de resina y las de acero, con lo que creo que casi nadie nos quedaríamos contentos. Pero lo que sí se demanda son modelos con módulos más completos en cajas íntegramente de resina, incluyendo su parte trasera. Son muy pocos los fabricantes que ofrecen algo así, y de hecho en Casio el único reloj que tenemos de este tipo es el F-28. El último modelo en aparecer en el mercado con una caja de resina en su totalidad (exceptuando, obviamente, los tornillos de cierre) fueron los prodigiosos relojes de la serie VCL (VCL-100, VCL-101, VCL-110, VCL-120...). No estaría de más ver en el catálogo de Casio un par de modelos con ese tipo de construcción y con módulos tan completos.


- Movimientos propios. Esta es una de esas demandas históricas: que cuando abras un Casio para cambiarle la pila no te encuentres con la terrible sorpresa de que dentro tengas un Citizen o un Seiko. Por desgracia para los que amamos los relojes de Casio "fabricados por Casio" la tendencia a corto plazo parece ir a la inversa de lo que deseamos. Si Casio dejaba todos sus movimientos analógicos de muchas de sus gamas (como la Collection y la Edifice) a Citizen, ahora ha decidido hacer lo mismo con sus solares, y su tecnología histórica de Battery Less ahora se está sustituyendo por la solar de Seiko. No sería descabellado pensar -como algunos de nuestros lectores señalaban en Relojes Digitales- que de aquí a no muchos años Casio acabe montando módulos chinos como montan otras marcas ahora, como hacen en Sector o Nowley. De hecho ya ni muchos chips o sensores los fabrican ellos, algo que es paradójico porque Casio se presupone que es una compañía especializada en electrónica.

- Cristal de zafiro. Por fortuna esta es una de esas cosas que sí está incorporando Casio, al menos -no podia ser de otro modo, con lo caro que es el zafiro- para algunos relojes de las gamas más altas (llamadas "premium") de G-Shock y Edifice.

- Vuelta a los relojes calculadora. Sí, muchos echan de menos nuevos modelos calculadora, sobre todo modelos con calculadoras científicas como las CFX (Casio CFX-20 y Casio CFX-200). Aún así hay que reconocer -y agradecer- que Casio sea de las pocas marcas que continúan con relojes calculadora en su catálogo, entre ellos el mítico CA-53.


- Relojes con juegos. Esta es una petición que quisieran ver echa realidad los más nostálgicos de Casio, la cual, por cosas bastante obvias -un juego en un pequeño reloj con dígitos no puede competir con una consola de las de ahora- es muy dudoso que Casio vuelva a fabricar. Por eso no, no parece lógico que vayamos a ver aquello llamativos Casio GT-6, Casio GS-2, o Casio GC-7 y similares, aunque quién sabe.

- Marlin. Por supuesto en una selección de peticiones para Casio no podía faltar la demanda de un Marlin. Aunque "al trantran", Casio sigue manteniendo los HD en su catálogo, así que volver a ver el logo de un Marlin en un digital no debería ser mayor problema. ¿Por qué no lo hacen? No será porque teman no venderlos.


- Módulos "a lo antaño": Sí, esta no es una petición demasiado repetida ni mencionada, porque es una de las cosas que no saltan a la vista, pero no queremos ver módulos "auto-desarmables", atornillados a la caja o con esos endebles muelles o chapitas sueltas por los pulsadores. Volver a la filosofía del antiguo pero eficiente y robusto módulo en pastilla, con el plástico duro en la parte posterior (y no un trozo de cinta adhesiva) sería un gran paso y uno de nuestros ideales.

- Leyendas protegidas bajo el cristal. Otra de las virtudes de los Casio de siempre eran sus leyendas, "imborrables" bajo el cristal. Hoy se han ido sustituyendo por serigrafías que han ido ganando terreno desde los años noventa. Son más espectaculares, pero menos duraderas.


- Tornillos "de adorno". Horrible, dantesco y hasta repulsivo, como califican algunos clientes de Casio, el que todo un Rangeman o un Frogman incorpore unos cuantos tornillos con ninguna función práctica más que la de añadir peso y molestias como si relojes de juguete se tratasen. En un modelo de Collection sería en cierto grado -o en parte- digamos que "asumible", pero en relojes que rondan el medio millar de euros como los Frogman es impensable que el comprador llegue a casa y se encuentre con un par de tornillos que Casio ha puesto allí porque en la fábrica les sobraban.

- Nuevos sensores. Los sensores de dirección, altímetros y barómetros ya están muy vistos. Muchos son los usuarios que piden innovación de nuevos sensores, o que vuelvan a rescatar algunos de los antiguos, como los sensores infrarrojos para la temperatura, de rayos UVA o displays táctiles.

- Más cajas cuadradas para los digitales. O rectangulares. En suma: cajas de digitales de ese diseño atemporal, y no cajas redondas con las que todas las marcas masifican el mercado y que nos quieren hacer meter a calzador.


- Un LCA "real". Desde el lanzamiento del FS-02 hace más de diez años Casio no tiene un modelo LCA realmente útil. Cierto que mantiene las variantes AE, y es uno de los pocos fabricantes en hacerlo, pero en la práctica sus zonas LCA son muy poco útiles. Un modelo con módulo completo y display con una gran zona LCA sería estupendo.

- Menos horarios mundiales. La dependencia abismal del horario mundial le puede pasar factura al usuario que quiera tener un reloj "para muchos años". Cierto que esta es una tendencia que siguen la mayoría de fabricantes, pero no estaría mal que Casio equilibrase un poquito la balanza y volviera a apostar seriamente por los antiguos y más flexibles "dobles horarios".

- Módulos con hora en todos los modos. Cierto que es difícil, en ciertos modelos y por el tamaño de su LCD, ofrecer hora en todos los modos, pero si en los ochenta con aquellos relojes mimimalistas Casio era capaz de incorporarla, ¿por qué no ahora? G-Shock -por cuestiones tácticas obvias- y Data Bank al menos deberían ser las submarcas que casi obligatoriamente tendrían que tener esta útil particularidad en la mayoría de sus módulos, algo que lamentablemente no siempre se da.


¿Y qué cosas ha hecho bien?
Bueno, por supuesto Casio ha hecho innovaciones con las que también han acertado y que les ha hecho merecedores de muchos aplausos. Entre ellas podríamos mencionar:
- Relojes con Bluetooth y autonomía no de días, ni semanas, ni meses... Sino de años.
- LCDs espejados, con un resultado estético asombroso y muy bonito.
- Triples sensores (V3) mejorados.
- Más oferta para la gama Tough-Solar, con nuevos e interesantes modelos.
- Más variedad de módulos con pilas de larga duración.
- Y algo que ha ido desapareciendo y que pocos echarán de menos: cristales abombados. El "genio" que ideó ese tipo de cristales debería estar colgado del rascacielos más alto de Tokio.


| Redacción: Zona Casio