El reloj de Apple no será de plástico. Tendrá una caja de metal y con tecnología aeroespacial de vanguardia, MIM (moldeado de metal por inyección, o "Metal Injection Moulding" en sus términos ingleses). No es nada nuevo este tipo de tecnología, que consiste en un procedimiento parecido al moldeado plástico, pero usando partículas de metal que luego son sinterizadas, pero el problema que han encontrado en Apple es conseguir el acabado que quieren darle, que según mencionan algunas fuentes sólo lo han logrado "en un 50%".
Las ventajas de la tecnología MIM es que el metal no necesita un mecanizado posterior, ya que al utilizar moldes las piezas (las cajas, en este caso) salen todas iguales, cumpliendo los mismos patrones de calidad y diseño sin elevar los costes. Si Apple no consigue superar esos contratiempos, tendrá problemas a la hora de, por ejemplo, cambiar los colores exteriores de sus relojes y ofrecer diversas decoraciones y patrones. De hecho esta es una de las causas de que otros smartwatches como el Qualcomm Toq recurran a cubrir buena parte de su reloj con elementos de resina para dotarle de color.
| Redacción: Zona Casio
Un reto tecnológico muy interesante para la industria, en este caso de Apple.
ResponderEliminarCreo que ese es el espíritu que precisamente considero que ha perdido Casio en gran parte.