Algo está cambiando

Durante estas semanas los operadores de telefonía móvil aprovechan sus catálogos para incluir una extensa lista de todos sus servicios, ofertas y productos, de cara a la campaña de Navidad. Normalmente incluyen ofertas de conexión e, históricamente, era uno de los meses (junto con el inicio del verano) donde ofrecían las más suculentas rebajas para atraer nuevos clientes. Pero algo está cambiando, porque en este mes de diciembre no es así. O no es sólo así.

Poco a poco se han ido añadiendo, a la lista de productos que ofertan las compañías, tablets y ultrabooks. Pero si por un casual te da por echarle un vistazo a estos últimos catálogos de productos de los operadores, te encontrarás con una sorpresa: la aparición también de relojes en ellos. Así, su catálogo, que inicialmente era una guía de teléfonos en donde podías elegir el que más te gustara (y se ciñera a tu economía), ha pasado a ser toda una variadísima combinación de dispositivos electrónicos. Y los smartwatches también han llegado allí.



Me he preguntado por qué no están los modelos con Bluetooth de Casio. Están los de Sony, y también el ultimísimo de Samsung (Smartwatch 2 y Gear, respectivamente). Si te paras a pensarlo, ambos relojes no ofrecen nada extra a las operadoras (quiero decir que no tienen por sí mismos conexión alguna a Internet, sino que se conectan al Smartphone), lo mismo que hace el de Casio (dejando aparte, obviamente, que luego unos tengan una tecnología y otros otra), por lo que las operadoras no ganan nada por el consumo de datos.

Tampoco es por precio. El Galaxy Gear cuesta 279 € y el Sony Smartwatch 2, 189 €. Los dos más caros que los de Casio (el GB-5600AA y GB-6900AA se pueden encontrar por 179 €). Pero si nos detenemos a leer el catálogo de las operadoras, te encuentras con que los dos salen notablemente mucho más baratos si compras a la vez un smartphone, que entonces sí, sí consume datos. Algo que de momento no pueden hacer con Casio (aunque Casio tenga, como todos sabéis, el G'zOne).


Definitivamente algo está cambiando, y que se empiecen a ofertar tan agresivamente estos relojes, es un síntoma claro de ello. No se si para bien o para mal, no sé en qué quedarán los relojes "de siempre" (yo soy de la opinión de que los relojes clásicos, sean de cuarzo o mecánicos, tienen muchas más ventajas a día de hoy que éstos otros), pero nada ya es como antes. Evolución lo llaman algunos, adaptarse a los tiempos, dicen otros. ¿Habrá que empezar a hacer acopio de los modelos digitales de ahora, porque van a desaparecer? De momento no. Pero puede que los calendarios automáticos de muchos de ellos, que vaticinaban su fin para el año 2029 o 2039, no lleguen ni siquiera a verlo.


| Redacción: Zona Casio