Uno de los aspectos más criticados desde el lanzamiento de los Frogman GF-1000 (uno de los modelos "top de gama" de G-Shock de la serie Master of G) fue la presencia de tornillos estéticos en el frontal. Que este tipo de tornillos aparezcan en modelos de la línea Collection simplemente "para lucir" es comprensible, pero que lo hagan en todo un Frogman cuyo precio ronda los 700 €, es para pensárselo. Casio fue ampliamente criticada por ello, y es una crítica que se ha sucedido todos estos años de manera casi constante, no entre los más puritanos y seguidores de la marca, pero sí entre muchos de los que se sienten atraídos por ese reloj y luego se encuentran con esa "sorpresa escondida", que en muchas ocasiones consideran razón suficiente para echarse para atrás y no comprárselo.
Cuando se lanzó el Rangeman GW-9400 hubo muchas personas que aseguraron que Casio no había caído en el mismo error, y que realmente esos tornillos que luce en el frontal no son simple material de pega para añadir un peso extra y para lucir, sino que estaban anclados a la caja, sosteniendo firmemente el bisel. Mentira.
La orientación de esos cuatro tornillos frontales, apuntando hacia el centro de una forma milimétrica ya hace dudar de por sí de que sean tornillos funcionales. En realidad no es más que eso: cuatro "embellecedores" sin ninguna otra función que la simplemente estética. Para un reloj hecho para dar batallas y pensado para que soporte el duro trato diario y salidas de aventura, el añadirle cuatro "agujeros" para que entre polvo y suciedad simplemente por motivos estéticos no parece que sea la más acertada solución.
Personalmente no me gustan los embellecedores que no aportan nada a un reloj de este tipo (otra cosa sería en un reloj para vestir). Casio no es la primera vez que lo hace, su línea G-Shock de los últimos modelos (algunos Gulfman incluídos) está cargada de elementos plásticos sólo de adorno. Otros siguen siendo más fieles al modelo original, y de adorno no tienen nada, el reloj ya luce bastante así tal cual es. Pero llama más la atención que el fabricante japonés haya tomado ese camino, el de añadir tornillos que no son tornillos para una máquina que se supone es un dispositivo "serio de verdad". El PRW-3000 también es serio, y no los tiene. ¿Será verdad, como cada vez más piensan algunos, que Pro Trek está vapuleando a G-Shock en cuanto a presencia y contundencia se refiere? Ese es el problema cuando llamas a estrellas pop, raperos y a actores para popularizar tus G-Shock: que para que luzcan tienes que rodearlos del mismo "papel couché" que tienen esas estrellas. De brillos llamativos y de accesorios estéticos inútiles.
O dicho de otra manera: de mucho ruido y pocas nueces.
| Redacción: Zona Casio
cualquier día pondrán de pega los tornillos también d ela tapa trasera, como en los relojes baratos antiguos
ResponderEliminarCreo que no embellecen nada. Si tan solo fueran unos tornillos más esteticos, digamos de cabeza allen o torx... Pero no, simples tornillitos de cabeza plana.
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