Deporte sano

G-Shock, y en menor medida Baby-G, es muchas veces objeto de críticas muy injustas. Somos a veces excesivos con estas marcas, y desde muchos sitios (nosotros en algún momento también lo hemos hecho, no estamos libres de pecado) les acusamos de sus relojes "de plástico" o de su promoción con gente del mundillo de los monopatines, del surf, del BTT o del BMX. Pero nos olvidamos de la enorme ayuda que G-Shock, y estos embajadores deportistas, prestan a la juventud, a los adolescentes y a los niños -y no tan niños-, inculcándoles valores de deporte, compromiso y compañerismo.

Todos los embajadores de G-Shock y Baby-G son personas que tienen algo en común: el deporte. El deporte sano, como forma de dejar correr toda la adrenalina de la, muchas veces, explosiva adolescencia. Una forma sana de divertirse y pasar el tiempo. Sana y enriquecedora, fuera de la imagen tergiversada que a veces se tiene de jóvenes gamberros y borrachos de botellón de fin de semana.



Yo, que en una etapa de mi vida me la he pasado durante años como educador social, sé muy bien los grandes beneficios que a los más jóvenes les hace la práctica del deporte. En estos tiempos de imagen superficial, de la apariencia y de las consolas de videojuegos portátiles, que marcas como G-Shock y Baby-G apuesten por potenciar entre nuestros adolescentes esa otra imagen de actividad, de movimiento y dinamicidad, es algo que hay que aplaudir. Y no ir en contra de ello o ponerle trabas.

¿Es que habéis conocido alguno de vosotros a algún chaval que practique deporte y se dedique a emborrarcharse o a drogarse? El deporte ha sido una de las actividades que más ha ayudado a evitar que muchas chicas y chicos evitaran contactos con otros círculos más peligrosos de los que se arrepentirían toda su vida. Conocí un caso de un chico que era un gran fumador, pero que pronto se aficionó a las carreras y al marathon. Cuando descubrió el mal que le hacía el tabaco en su entrenamiento (cada mañana llegaba con una tos horrible), en menos de una semana había dejado de fumar.


La imagen de G-Shock unida a los deportes (todo tipo de deportes, y no tiene por qué ser extremos, sino deportes "cotidianos" como la bicicleta o el monopatín) es una imagen que hace muchísimo beneficio a un gran número de chavales. Gente joven que ve en esos relojes algo más allá que una moda o un complemento, sino que forma parte de su personalidad, de su forma de entender la vida. Una vida sana, alejada de estímulos artificiales y adicciones nefastas. Esa es la imagen que les quedará grabada para su futuro respecto a los G-Shock, y que hará que esos relojes representen, ya siempre para ellos, unos años en donde descubrieron valores imprescindibles que les enriquecieron muchísimo como personas.





| Redacción: Zona Casio