Nuevos Casio CA-500: relojes calculadora cromados, y de diseño oblongo

Casio difundió ayer toda la información de sus nuevos modelos CA-500, que no son más en realidad que unos CA-53 convencionales, pero con un exterior cromado y una caja levemente oblonga. Para Casio estos modelos, que vienen a incorporarse también a su línea de moda Vintage, son un homenaje a los famosos modelos de calculadora del principio de los años ochenta que, en su momento, crearon gran expectación (y en donde Casio jugó un importante papel con sus relojes que incluían calculadora científica como los CFX-20/CFX-200, por cierto).

Desgraciadamente estos no son siquiera ni la sombra de aquellos, no ya porque su módulo sea el más simple de los existentes en calculadoras, sino porque ni tan sólo se han molestado en mejorar su teclado, uno de los puntos más débiles y frágiles de estos modelos, puesto que sus teclas de goma se deshacen aún sin usarlas. Habría sido un gran acierto aprovechar la ocasión para ponerles teclas duras -como llevan las ClassWiz, sin ir más lejos-, un cristal mineral, y una caja de acero al menos, habida cuenta del considerable aumento de precio que acompañan a estos CA-500, y que sería lo más lógico.




Dos de ellos se destinarán al mercado europeo, un "inútil" CA-500WEGG-1B (no te lo compres porque en su display en negativo no se ve un pimiento), el CA-500WE-1A que hará de estándar, y el CA-500WEG-1A, dorado, y único que también llegará al mercado americano. Se venderán en agosto a un precio de 70 euros el plateado, y de 90 euros los otros dos. Teniendo en cuenta que por estos modelos casi se piden ya 100 euros, uno no se explica el que le hayan puesto tan sólo un simple cromado, por muy lustroso, brillante y llamativo que resulte.

Sea como fuere, estos relojes (que en Casio mencionan que su grosor se ha llevado al mínimo, de 8,2 mm), están obviamente pensados para ser reloj de temporada, un modelo de estilo para acompañar "outfits" como lo llaman ahora, y en donde lo primordial no es ni su módulo, ni sus especificaciones, ni sus funciones, ni sus materiales, sino tan sólo que brille, que tenga color, y que reluzca cuanto más mejor. Si eres de ese tipo de público, pues te encantará, porque específicamente estos relojes apuntan a eso.



Respecto a su módulo, como es el mismo que el de los CA-53, no hay mucho que contar: doble horario, cronógrafo, y alarma (carece de iluminación). Su calculadora muestra hasta 8 dígitos, y se pueden realizar las operaciones básicas de suma, resta, multiplicación y división con ella (y nada más). Pero cuidado porque, como decimos, sus teclas tienen fama de a las pocas pulsaciones, "desaparecer". No obstante, ya te lo advertimos, este tipo de relojes están pensados para cumplir su papel de simple apariencia, y poco más. Son simples Water Resist, cristal de resina, y caja de resina. Pero para pagar cien euros por ellos mucho tienen que gustarte los brillos, sinceramente.