Pongámonos en situación: Vuelta a España de 1989. La época dorada del cuarzo (entendiendo éste como el reloj digital) llegaba a su fin, pero aún daba sus últimos coletazos. La Etapa 21 de esta Vuelta coincidía en unos años en donde Pedro Delgado ("Perico") viviría sus mejores temporadas en competición, de hecho acababa de ganar el Tour de Francia el año anterior (1988). En esa Vuelta a España del 89 el líder del equipo iba a ser Miguel Induráin, que ya apuntaba maneras, pero una caída hizo que Delgado cargase sobre sus espaldas toda la responsabilidad y recuperase los galones.
Estamos en la Etapa 21 de aquella Vuelta, en ella se disputaban el primer puesto de la General Pedro Delgado y Fabio Parra, separados por tan sólo 57 segundos a favor del segoviano. Para llegar a la meta (situada en destilerías DYC en Palazuelos de Eresma) se tenían que recorrer varios puertos encadenados por la sierra de Guadarrama, o sea, en tierras de Delgado.
Esa escasa renta hacía que el ganador de la Vuelta estuviese en un pañuelo, y el poderío del Equipo Kelme (donde corría Parra) hacía presagiar un duro combate en la carretera. La victoria no sería fácil para nadie, desde luego.
Fabio Parra ataca desde lejos, subiendo un puerto, y aunque en un primer momento Delgado logra ponerse a su rueda, no consigue mantenerse y el del Kelme se va hacia su compañero, estratégicamente lanzado hacia adelante durante los primeros escarceos de la Etapa, para ayudarle entre puerto y puerto.
En unos tiempos en los que el cronometraje no era como ahora (las bicis de carretera aún tenían las palancas de cambio en los cuadros, se usaban rastrales, no había radio ni sistema de comunicación alguno entre los coches y los ciclistas, el casco era una pieza casi de extraterrestres que nadie usaba y, por supuesto, las bicicletas no llevaban ciclocomputador...) el reloj en las muñecas de los ciclistas era no sólo una ayuda, sino una herramienta de trabajo imprescindible para saber el tiempo transcurrido y, por supuesto, la hora. Obviamente el reloj que utilizaban era un reloj digital.
Fue en esa decisiva etapa donde ocurrió un hecho muy curioso que las cámaras de la entonces Televisión Española captaron en el momento: el compañero de Parra, Omar Hernández, llega a la meta. Pero en lugar de pasar a descansar como hubiera sido lo lógico, se detiene en ella y revisa su reloj digital. Está mirando el tiempo que transcurre hasta la llegada de Pedro Delgado para poder comprobar en el momento si Parra había ganado la Vuelta. Al final no lo haría por muy pocos segundos pero dejaría para la historia una de las imágenes más curiosas sobre la unión de reloj digital y ciclismo.
Por cierto que en las imágenes no se sabe si el reloj de Omar era un Casio, pero nosotros hemos hecho los deberes y realizado nuestras propias investigaciones. Era habitual ver a Omar con relojes digitales de Casio, de hecho en algunas fotografías aparece con lo que podría ser la variante de un W-500, el reloj más avanzado de la época en cronometraje profesional, de manera que sí, probablemente el reloj que haya cronometrado antes que nadie el desenlace de aquélla competida Vuelta a España del 89 fuera, en efecto, un Casio.
| Redacción: ZonaCasio.com
Muy interesante, en los años 80´y 90´el ciclismos hacía furor, yo era muy aficionado al ciclismo en los 80`y lo seguía con mucho interés, hoy en día parece que está en horas bajas.
ResponderEliminarCon respecto a los relojes Casio aquí podéis ver el reloj que llevaba Pedro Delgado a principios de los años 80´, yo creo que es un Casio F-5 o en su defecto un Casio F-82 que son muy similares.
http://fotos.miarroba.es/fo/bbb2/2E56A7F52B2E562B85872D562B82FE.jpg
http://fotos.miarroba.es/fo/1f65/1E4E481E5D264DD656002D4DD65349.jpg
http://www.youevent.es/sport/.%5Cmultimedia%5Cgaleria%5CImagenOcioMaillotOficialMarchaPedroDelgado2015-1.jpg
Como aunque me gustan las bicis, soy más de coches, saco a colación esta fotografía. Joan Villadelprat lo ha comentado varias veces. Corresponde al Gran Premio de Bélgica en 1993, y el monoplaza que vemos es un Benetton.
ResponderEliminarEl piloto, es el irrepetible Kaiser, o sea, Michael Schumacher, que llegaría a ser 7 veces campeón del mundo, y que llevaba un Casio pegado a su volante para controlar los tiempos.
http://www.f1-photo.com/Ressources/Gallery/1993/Belgium/Schumacher_1993_Belgium_02_PHC.jpg.
Un año después, se proclamaría campeón del mundo, y empezaría a ser la imagen de Audemars Piguet, Omega, ... Pero seguro que recuerda con más cariño que ninguno ese humilde Casio F, y toda la utilidad que le dio.
El casco ayuda mucho! Aunque entiendo que ellos no lo usaran, al ser profesionales probablemente se accidentaban muy poco
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