¿Existe una solución milagro para rescatar un reloj al que le ha entrado agua?

Hace no muchos días, a nuestro correo nos llegó una nota de prensa bastante curiosa. Hablaba de un nuevo producto destinado a componentes y dispositivos electrónicos que era capaz de recuperarlos sin problemas, y que era casi seguro al cien por cien. La mayoría de nosotros, que amamos nuestros relojes y tenemos un modelo preferido que cuidamos y mimamos, no les hacemos prueba de estanqueidad alguna con el cambio de pilas (es decir, verificar que siguen siendo totalmente sumergibles o resistentes al agua, según sea el caso) o con el mantenimiento habitual (engrase de juntas, limpieza...). De modo que, si por accidente o descuido, un día le entrara agua en su interior, podríamos quedarnos de pronto sin nuestro preciado reloj. Ante esta tragedia podemos vernos tentados a gastar nuestro dinero en recurrir a un kit de estos que anuncian, en donde te aseguran la recuperación de los elementos dañados por el agua.

Por fortuna muchos de los relojes de Casio no son sólo resistentes al agua, sino que en su construcción y diseño se ha tenido ésto tan en cuenta que, aunque les entre algo de agua, con una simple limpieza pueden recuperarse. No hablemos ya de los G-Shock, que aguantan frío, barro, y condiciones extremas. Pero aún así siempre nos podemos encontrar con el peligro de que les entre agua.

Antes de continuar, conviene señalar que, una vez le hayas cambiado la pila a tu reloj, y si no le has hecho prueba de estanqueidad (que no se la habrás hecho, "como es habitual en todos nosotros"), trates tu reloj (o lo intentes) como un modelo ya no sumergible. Bueno, podrá soportar sin problemas salpicaduras y demás, pero a medida que pasa el tiempo tendrás más probabilidades de que los sellos y juntas pierdan elasticidad y cualidades (es común a todas las gomas).

Hecho este inciso, tras conocer las virtudes del producto en cuestión, nos pusimos en contacto con personas de un SAT de reparación de elementos electrónicos para conocer su opinión sobre ese producto. El producto al que nos referimos se denomina iRescue Kit, y lo puedes encontrar aquí. En su página oficial hablan de que pueden recuperar todo tipo de dispositivos electrónicos dañados por humedad, desde teléfonos móviles, hasta reproductores multimedia o, cómo no, relojes. El problema es que los daños por humedad son físicos, y por ello suelen ser irreparables. Aunque en los relojes es más fácil evitarlos (no existen ranuras SD para tarjetas de memoria, están más aislados...), una vez producida la corrosión pueden ocurrir pérdidas de tensión, cortocircuitos, pistas cortadas... De hecho el problema no es la humedad, ya que la humedad en sí se puede quitar, pero la corrosión de los metales y los desperfectos que causa ya no tiene vuelta atrás.

Con mucho cuidado y esfuerzo, en determinados componentes (y previo tratamiento que en ocasiones sólo se pueden ver y distinguir a nivel microscópico), desde el SAT nos dijeron que se puede conseguir que el reloj vuelva a funcionar por un tiempo, pero a la larga volverá a dar problemas y tendrá fallos tan peregrinos como, por ejemplo, que dejen de verse determinados segmentos, o que algunas funciones operen mal o "desaparezcan" de repente. Todo ello suele ser a veces signos de daños por humedad, y son irreparables.

Por ello, por muy buenos que sean este tipo de kits y por muy tentados que estemos de usarlos para recuperar nuestro reloj, si la humedad lo ha dañado físicamente, tarde o temprano comenzará a presentar fallos.

Si a tu reloj le ha entrado agua en su interior, intenta seguir lo más inmediatamente posible esta serie de pasos para evitar que esos daños se produzcan, y con un poco de suerte podrás volver a usarlo sin problemas:
1 - Extrae la pila (o acumulador) inmediatamente.
2 - Extrae el módulo y ponlo en un horno eléctrico ventilado (lo más apropiado sería un horno de seco, pero probablemente no dispondremos de él) a unos 50 grados. Esto debería bastar para secar todos sus componentes electrónicos en unas siete horas.

No es recomendable usar alcohol (como en algunos sitios aconsejan), porque dañan los plásticos, a no ser que uses alcohol isopropílico (sólo y únicamente ese tipo de alcohol). En cualquier caso tampoco es aconsejable por los graves peligros de intoxicación que este tipo de alcohol conlleva. Pero como el módulo de un reloj suele ser pequeño, a falta de otras soluciones puedes intentarlo. Pero sólo ese tipo de alcohol y sólo en la placa del reloj (deberás desarmar todos los demás componentes). El alcohol desplazará al agua (es conveniente "agitar" la placa) y luego se puede secar fácilmente (el alcohol isopropílico tiene un grado de evaporación muy elevado). La placa deberías dejarla en inmersión unas 24 horas.

Sobra decir que nunca y bajo ningún concepto se te ocurra mezclar el alcohol isopropílico con el horno de seco, ni meter el módulo en un recipiento con alcohol y luego en el horno ni, menos aún, introducirlo en el horno con la pila puesta.

Otros trucos para casos "de emergencias" o que no tengas otra solución mejor a mano, es que lo introduzcas en una bolsa que se pueda cerrar herméticamente (o en un tarro) con arroz y bolsas de gel sílica, durante un par de días. Aunque es un buen desecante, el problema es que cuando la humedad se haya ido puede que ya esté dañada la circuitería, pero en ocasiones es una alternativa que también funciona. No dejes el tarro o la bolsa abierta porque la humedad ambiental inutilizará el proceso (o lo enlentecerá).

| Redacción: Zona Casio