No podíamos dejar pasar las novedades de este mes de mayo sin mencionar los nuevos EFR-539 de Edifice. Siguen más o menos la estela de los EF-523 y EF-539, pero en este nuevo diseño encontramos notables diferencias, no solo en la forma del contorno de los subdiales (y sus colores) del fondo, sino principalmente en la forma de la caja y en cómo esta continúa casi sin altibajos hacia el armis. Gracias a eso es, en el armis, donde el reloj presenta un aspecto muy robusto, muy varonil y agresivo. Tal es así que las asas apenas se le ven -pero están-, y es que en las variantes de armis Casio ha hecho algo específico que no debería pasarnos desapercibido (y que no es una solución que adopta solo Casio en relojes como este, sino que ya llevan haciendo otros fabricantes desde hace tiempo, como Citizen): las asas son diferentes dependiendo de que optes por el modelo con armis, o por el modelo con correa. Dicho de otra forma: no podrás adquirir una versión con armis y luego ponerle una correa, o viceversa. Y es que en los modelos "D" (EFR-539D) las asas se acercan casi hasta el centro del armis, mientras que los modelos "L" (EFR-539L) se quedan a una considerable distancia, en los extremos, para admitir todo tipo de correas estándar. Esta solución queda muy bien con el armis, pero el problema es ese: que no podremos cambiar armis por correa manteniendo el mismo reloj, sino que tendremos que cambiar de reloj dependiendo de si queremos o nos apetece llevar un armis, o una correa.
He de reconocer que apenas se nota la diferencia cuando los miras en un primer vistazo, y que ambas versiones (correa y armis) son preciosas, y no sabría decir cual de las dos me gusta más. Pero no estoy muy inclinado a favor de llevar relojes para armis específicos, y quizá por eso la de correa me inspire unas mejores sensaciones. Otro fantástico detalle que ha tenido Casio es pintar el bisel en dos tonos, en algunas de las versiones de los EFR-539, como en la azul (EFR-539D-1A2V) y en la bronce (EFR-539L-5AV), dando la sensación de que posee un bisel "encajado" en el borde de la caja, como si fuera un refuerzo, por cierto muy elegante.
