¿Sabías que uno de los empleados más antiguos de la factoría de Casio en Japón es Ryusuke Moriai? Probablemente no te diga nada, pero todo cambia si te recordamos que ese señor fue el diseñador de modelos tan icónicos como el F-91. Y seguramente te resulte muy llamativo que diseñase también algunos de los G-Shock. Su último reloj diseñado, precisamente, fue la línea Mudmaster. En efecto: de la misma mesa de dibujo (ordenador, más bien, en este caso), del mismo ingenio y de la misma habilidad partió el F-91, y partió el GG-1000 (por cierto, quizá tenga algo que ver en que ese sea el Mudmaster que más se vende, y uno de los Premium más vendidos).
Estas fueron solo algunas de las cosas que han descubierto los redactores que han estado visitando estos días la factoría Yamagata de Casio en Japón, donde se fabrican buena parte de sus relojes y, por supuesto, todos sus Premium. Y es que visitas de este tipo hay muchas, cada pocos meses suele aparecer alguna publicación diciendo que ha visitado la factoría de Casio, pero pocas tan suculentas como ésta, no en vano estamos hablando de una de las publicaciones más punteras de relojería -de todas las marcas, no solo de Casio- a nivel mundial.
Uno de los problemas de G-Shock no es solo la protección a impactos, al agua, y a vibraciones, sino también la protección a corrientes eléctricas. Sobre todo aquellos modelos con cajas de metal, necesitan un aislamiento óptimo para que los campos magnéticos no afecten al delicado módulo de su interior. Así, vemos cómo a la caja del GWF-D1000 se le somete a un simulador de carga electrostática Noiseken, un test que se utiliza para confirmar y asegurar la integridad de equipamiento electrónico. Con capacidad para más de nueve mil descargas continuadas, verifican la resistencia del reloj ante campos electromagnéticos e interferencias.
Pero no se acaba ahí. Otro de los sistemas utilizados por Casio es el proceso de protección ante empañamientos. Antes de ponerle la cubierta trasera o cerrar la caja del reloj, éstos son sometidos a una atmósfera artificialmente calentada de manera que, cuando el reloj se ensamble, no quede en su interior rastro de humedad que pudiera producir empañamiento. Este proceso es más eficiente al utilizado por la mayoría de fabricantes de relojes de lujo suizos.
En el reportaje también se incide sobre el cambio de tendencia de Casio hacia los relojes analógicos. De hecho, admiten que los digitales pueden ofrecer más cosas y más fácilmente legibles que los analógicos, y que muchos seguidores de Casio (claro, todos los que conocen la marca) califican ese cambio de posición como un paso atrás de la marca nipona. Pero lo explican de la misma forma que hace pocos días lo publicamos en este blog: el reloj digital triunfaría en un "mundo perfecto" destinado a la funcionalidad y practicidad, pero en el mercado actual y para la gente de hoy, los que más se venden son relojes analógicos. Los relojes analógicos -dicen, yo no lo comparto pero bueno- ofrecen más personalidad y crean vínculos emocionales más profundos, y estéticamente al gran público agradan más. Casio lo ha solucionado ofreciendo en muchos de sus movimientos una mezcla de ambos y, como bien sabéis, en su catálogo abundan los ana-digi. Por esa razón, intentan ofrecer lo mejor del mundo analógico (belleza, distinción, personalidad, acabado...) con lo mejor del mundo digital, en donde son grandes expertos (funcionalidad, practicidad...) y donde sin duda son líderes absolutos. Por eso se suelen invertir los displays digitales en los ana-digi, intentando dar preferencia a las agujas y que la parte digital pase inadvertida hasta que se requiera.
Internamente a este cambio de diseño y estrategia lo denominan en Casio "Intelligent Analog Watch Strategy", esforzándose por ofrecer en un G-Shock analógico lo que un G-Shock digital nos ofrecía hasta ahora. En el futuro, y dada la buena acogida que ha tenido su línea de productos nacida de esta nueva iniciativa, intentarán integrar con la última tecnología sus movimientos analógicos, ofreciendo las características de G-Shock, y la identidad de cada línea, con innovaciones como Bluetooth o GPS, ya una realidad.
Casio admite que su tecnología Waveceptor tiene los días contados, y que en el futuro quieren aspirar a que todos los relojes se puedan sincronizar vía radio independientemente del lugar donde uno esté. Hablan de Bluetooth LE como una solución a corto plazo, pero que, si la tecnología lo permite, la sincronización debería ser directamente del reloj usando Internet sin intermediario alguno (sin necesidad de smartphone, para que nos entendamos).
Finalmente, interesante es el apartado que dedican al futuro de Casio. Aunque su posición en el mercado de la relojería en Japón es privilegiada, en Casio son cautos, y admiten que uno de sus puntos débiles en la actualidad es el software. De hecho parecen reconocer que no les ha motivado nada el depender de terceros para su smartwatch, pero reconocen que no tienen un departamento de desarrollo e ingeniería de software lo suficientemente potente como para enfrentarse a algo así, y que su fuerte en estos momentos es el hardware.
Aún siendo conscientes de estas deficiencias, en Casio les cuesta invertir recursos y planificar en un entorno tan cambiante y complejo como el de la relojería, de hecho es esa la razón, la de ser cuidados y cautelosos, lo que les ha llevado a retrasarse tanto en su smartwatch y a lanzarlo bajo Android.
Por cierto, que el redactor comenta que le acompañaron algunos minoristas de marcas de lujo, y se sorprendieron que el proceso de fabricación de Casio en Yamagata estuviera a la altura de los mejores fabricantes suizos. A muchos aún les cuesta desprenderse del halo de reloj barato y de bazar que rodea a Casio, incluso dentro de los distribuidores europeos que los comercializan.
El reportaje cierra reconociendo que Casio podría introducir mucha más tecnología y funcionalidades a sus relojes, lo cual les piden algunos de sus clientes, pero que si no lo hacen es porque no quieren reducir aún más la vida de las pilas, o tener que prescindir de Tough-Solar, lo cual hay que reconocerles. Y es que, tal como están los Tough-Solar hoy día, muchos de los relojes de este tipo están justo en la frontera del límite de exigencia del acumulador, pedir o exigirle más sería hacer inviable que un reloj utilice esta tecnología, lo que sería una auténtica lástima. Porque la tecnología solar permite una libertad y unas ventajas medio-ambientales que deberían ser -como suele ser en Casio- un punto primordial e inflexible sobre el que trabajar, y tanto ella como la circuitería de larga duración (autonomía de diez años) son símbolos identificativos de Casio y uno de sus elementos distintivos que no deberían abandonar nunca. Diga lo que diga el mercado o los volubles gustos de la gente.
| Redacción: ZonaCasio.com | Más info: Ablogtowatch (en inglés)
¿Nadie se ha fijado que en ésta imagen aparece un nuevo reloj llamado "Groundmaster"?
ResponderEliminara ver si es digital :D
ResponderEliminarUn reportaje estupendo. Peor me he quedado a cuadros... ¿No tienen un departamento de software suficientemente potente?
ResponderEliminarEs inaudito. Declarar en 2015 casi 30000 millones de yenes en beneficios, y ahora quedarse tan pancho diciendo esto... ¿Que significa que no es suficientemente potente? ¿De verdad creen que es tan complicado reforzarlo con 5-10 personas más que se encarguen de ello?
sí Guti, pero tú que estás en ello sabes mejor que nadie que tener un departamento que desarrolle un sistema operativo no es coser y cantar, eso son palabras mayores. Si queremos hacer las cosas bien, claro. Que luego nos pasa lo de Zetta... :D
ResponderEliminarSupongo que antes era más fácil, hoy hay que lidiar con muchos componentes de muchos fabricantes y de muchas partes del mundo. Si ni siquiera Samsung pudo hacerlo (Bada, se quedaron por el camino), ni Nokia (Symbian...)... Hoy en día requiere tal inversión que podría poner a Casio contra las cuerdas. Es más, ¡si ni siquiera Google se atrevió, que tuvo que tirar de la comunidad GNU para su Android, qué más se puede decir!
Y luego mira el caso de Microsoft con sus Windows Phone, ¡que se van a pirar! Y son Microsoft!!
ResponderEliminarAh, y Nokia va a recurrir a Androd! Jaja! :D Es que la combinación tiempo-inversión en algo tan cambiante como son este tipo de dispositivos te puede hundir en la miseria. No es lo mismo que ponerle una calculadora a un reloj (más o menos eso ya lo tienen en sus calculadoras), o funciones similares.
ResponderEliminarYo también pensaba que Casio podría ser capaz, pero si ellos admiten que no pueden será porque es así. Eso sí, son Casio, y no se el qué pero algo en la trastienda seguro que tienen (sino no estarían patentando los futuristas relojes que patentan).
Me parece que Groundmaster era el nombre que tenían en mente para el actual Mudmaster, fijate en esta imagen de los tres relojes ( https://4.bp.blogspot.com/-90iIJiyFFas/WAypXK3hj4I/AAAAAAACXNw/GrtFyCwBCJAgx9wPu38RHBNpzKYG9yzfgCLcB/s1600/33-frogman-electric-2016-ocpk-581.jpg ) sobre la pantalla digital de Mudmaster dice en amarillo "Groundmaster".
ResponderEliminarEs verdad Gonzalo, ¡que buena vista!
ResponderEliminarCierto, pero entiendo que desarrollar un SO para un reloj, es algo mucho más sencillo que para un teléfono. Sino, veamos Peeble.
ResponderEliminarLo de Peeble es como coger Android y adaptarlo, ahorrándote el esfuerzo. Tampoco fue un desarrollo propio:
ResponderEliminarhttps://en.wikipedia.org/wiki/FreeRTOS
Podrían haberlo hecho en Casio en lugar del Android, supongo que por ciclo de vida y seguridad que les daba Android al estar detrás Google, prefirieron Android como estándar (aunque es una suposición claro, no lo sé, ellos sabrán :D ).
Si elecciones creo que hay bastantes para este tipo de "wearables", otra cosa es acertar con la correcta. Y de no hacerlo uno mismo, pues coger lo que haya mejor en el mercado en ese momento no me parece mal, y lo mejor a día de hoy (viendo que iOS no es una opción) es Android (y es la opción que eligen la mayoría, Tissot, TAG...). Es lo que todo el mundo usa. Eso te permite ahorrar luego en problemas de compatibilidad con la mayoría de smartphones del mercado (que son android o iphone, ahora mismo). Aunque ya se, eso de compatibilidad a Google como que le resbala también bastante :D Pôr cosas así (y muchas otras) odio los smartwatches.
Creo que Casio aprendió bastante con sus Bluetooth LE, que ya les dieron -y les dan- muchos problemas, y se lo debieron pensar dos veces antes de meterse en camisas de once varas. Es como decir: "buff, espera, espera, donde nos vamos a meter... Que con Android nos lo dan todo hecho" :D
ResponderEliminarAhh es verdad, no recordaba lo de FreeRTOS! De todas formas, lo encuentro más adecuado para un reloj que Android (más ligero).
ResponderEliminarEn una de las fotos se ve un empleado con un Casio más o menos antiguo el GA-56 me parece, eso demuestra que tienen gusto por la marca y sus relojes, no sólo por moda.
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ResponderEliminarGracias por tus apreciaciones, WR_100. La verdad es que tampoco quería hacer un "copy-paste" del artículo (es bastante extenso), pero con tus aportaciones creo que más o menos ya está completo. Gracias de nuevo.
ResponderEliminarMi Rangeman tiene sus 4 tornillos de la tapa trasera directamente atornillada a la caja...no hay un casquillo hembrilla que de durabilidad al conjunto.Mucho ruido pocas nueces.
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