Un reloj táctico, de ambientes extremos y capaz de lidiar en situaciones peliagudas debe tener, como mínimo, varios elementos comunes. Éstos deberán de ser:
- Disponer de hora en todos los modos.
- Una notable autonomía.
- Cronógrafo y temporizador.
- Resistente al agua.
- Resistente a impactos.
- Inmune a campos magnéticos.
También podríamos mencionar algunas características que, si bien no pueden ser imprescindibles, sí que habría que considerar. Una de ellas se refiere a materia constructiva. Sería adecuado que estuviese recubierto de un material que no causara ruidos ni roces al tropezar. Por supuesto, que el cristal fuese robusto, resistente y duro en caso de caídas.