El G-Shock con GPS y el Edifice con Bluetooth estarán en el mercado a finales de año

En la feria de Baselworld Casio anunció que sus primeros modelos analógicos con Bluetooth (el Edifice EQB-500) y su primer G-Shock híbrido (el GPW-1000) llegarán al mercado durante el último semestre de este año. Como recordaréis, Casio los presentaba en la feria de Basilea en forma conceptual, aunque era patente por la imagen que tenían que los relojes ya estaban prácticamente terminados y en fases de pre-lanzamiento muy avanzadas. Harald Schroeder, el responsable de marketing de Casio para Europa, fue quien confirmó esos lanzamientos y además adelantó que esperan una gran demanda de estos dos relojes, ya que "la gente busca hoy en día cada vez más este tipo de tecnología, así que estamos muy convencidos de su éxito". Aparte de en su propia intuición (que de relojería saben un rato, obviamente), se apoyan en el éxito de los ya comercializados modelos con Bluetooth de su línea G-Shock, los cuales "tienen una gran popularidad", ha dicho Schroeder.

No he podido resistirme a traer aquí también una curiosidad: la respuesta de Marc Hayek, uno de los responsables de las marcas del Grupo Swatch (Breguet, Blancpain, Jaquet Droz...), al preguntarle sobre si harían algo similar a lo que ofrece Casio. Hayek vino a decir que "técnológicamente es posible añadirles a los relojes muchas cosas", pero eso no es suficiente para ellos: "eso no quiere decir que aunque sea posible, la gente vaya a comprarlos". Así, seguirán apostando por movimientos más clásicos. Parece ser que el modelo que tienen digital táctil (el único digital del grupo Swatch que les queda) no les está dando demasiadas alegrías. Y es que era obvio... No entiendo cómo en Swath continúan vendiendo esa cosa tan "horripilante". Pero siguiendo con las declaraciones de Hayek, dijo también que si un reloj es menos cómodo de usar, y al final el cliente lo utiliza para la misma función de siempre (es decir: no aprovecha todo su potencial), entonces ese reloj solo ofrece desventajas. Aquí no le falta razón, y además, llamó a reflexionar a los fabricantes de relojería en qué porcentaje de "útiles" e "inteligentes" pueden ser las nuevas funciones de todos estos relojes desde el punto de vista práctico.



Otro de los que están en contra los modelos tecnológicamente avanzados es Stephane Linder, de Tag Heuer, quien dijo estar de acuerdo con las palabras de Hayek y mencionó que un reloj inteligente es terriblemente más difícil de usar que un móvil: "con un smartphone tengo una pantalla de gran tamaño con la cual moverme, pero con un reloj eso no es posible". Aún así declaró que estaban observando los movimientos de sus rivales para ver cómo podrían responder de la mejor manera dependiendo de lo que ocurra en el futuro.

Eso sí, lo que quedó patente en Baselworld es que a los relojes de lujo, los mecánicos más elitistas y que siempre se han vendido, no les preocupa lo más mínimo lanzamientos como la tecnología híbrida de G-Shock o el Bluetooth de Edifice. Según mencionan algunos de estos fabricantes, hoy se está viviendo una auténtica revolución y una vuelta a los relojes más clásicos y de movimientos mecánicos más complejos. Y es que el lujo (como ocurre con marcas como Ferrari, Lamborghini o BMW en el mundo de los automóviles) no sabe de crisis.

| Redacción: Zona Casio