Relojes en la literatura (91)

Título: Todas las fiestas de mañana

Autor: William Gibson

Fragmento:

Tras una pausa, el chico lo sigue, alzando el reloj de la esfera negra como si fuese un pequeño animal.

No será nada, piensa Fontaine. Un Waltham del ejército con las entrañas oxidadas. Mierda. Mierda, has dejado entrar al colgado este.

El chico se queda en el centro de la pequeña superficie de la tienda, mirando. Fontaine cierra la puerta, da una sola vuelta al cerrojo, y se retira detrás del mostrador. Hace todo esto sin bajar el revólver, evitando acercarse al chico, y sin quitarle los ojos de encima.
Los ojos del chico se abren al ver la bandeja con los relojes.

- Lo primero es lo primero - dice Fontaine, retirando la bandeja con la mano libre -. Veamos.

Señala el reloj en la mano del chico.

- Dame - ordena, golpeando sobre el descolorido logotipo dorado de Rolex sobre una almohadilla de piel sintética, acolchada, de color verde oscuro.

El chico parece entenderlo. Deja el reloj en la almohadilla, y cuando retira la mano Fontaine le ve las uñas, las descuidadas uñas de bordes negros.

- Mierda - murmura Fontaine -. Retírate, ahí, un momento - dice, señalando el sitio amablemente con el cañón de la Smith & Wesson. El chico da un paso atrás.

Sin dejar de vigilar al chico, Fontaine rebusca en el bolsillo izquierdo de la gabardina y saca una pequeña lente de aumento de relojero, y se la pone en el ojo izquierdo.

- No te muevas, ¿eh? No quieres que se dispare la pistola...

Levanta el reloj, y se permite un rápido vistazo a través de la lente. Silba entre dientes, muy a su pesar.

- Jaeger LeCoultre. - Alza la cabeza y mira; el chico no se ha movido. Vuelve al reloj, esta vez observa las marcas de la caja. - Royal Australian Air Force, 1953 - traduce -. ¿Dónde has robado esto?

Nada.

- Está casi en perfectas condiciones. - Fontaine se siente, de pronto, profunda e inesperadamente perdido -. ¿Es una reproducción?

Nada.

Fontaine mira a través de la lente, y piensa que quiere este reloj.

- ¿Todo original?

Lo deja sobre la almohadilla verde, encima del desgastado símbolo de la corona, observando que la correa de piel de becerro ha sido cosida a mano a unas barras permanentes en dos lados de la esfera. Tan solo este trabajo, que reconoce como italiano o austríaco, podría costar más que algunos de los relojes de la bandeja. El chico lo recoge inmediatamente.

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Relojes G-Shock para militares "de lujo"

Curiosa la última publicidad de G-Shock, en donde anuncian "relojes militares" de G-Shock pero "de lujo". Es llamativo que ahora lleven el lujo hasta el mundo militar, cuando era precisamente un baluarte de lo contrario, es decir, de la modestia, la funcionalidad y, sobre todo, la economía y lo espartano.

No he podido evitar recordar, mientras miraba estas ediciones especiales "lujo militar" de los GST-B100 de G-Steel, la canción que aparece en "Monster Hunter" (la tenéis a continuación) haciendo referencia a la dura vida de los militares y a sus dificultades económicas y de equipamiento. "Pides una talla 11 y te dan una 9", y por supuesto, aunque llevadas un poco al extremo y a la ironía, tienen bastante de realidad. Una película, todo sea dicho, con profusión de relojes G-Shock por todas partes, en las muñecas de los militares protagonistas. Muy lejos, por tanto, de estas "ediciones militares de lujo", que precisamente son la antítesis de lo que debe ser un reloj militar. Pero en fin, ¿por qué ya no nos sorprenderá nada esto?

Galería de los lectores (77)

Baby-G x Ryan, el simpático león (no osito) de Baby-G

El próximo 25 de febrero será lanzado en Corea una edición muy especial del Baby-G BGD-501; se trata de la Kakao Friends, aka Baby-G x Ryan, de la compañía surcoreana del mismo nombre (antes Daum Kakao), y que viene a ser por aquellos lares como la Hello Kitty para los japoneses. En la actualidad los Kakao Friends lo forman todo un conjunto de caracteres, y en torno así gira un mundo de merchandising, incluso popup-stores y demás.

Por todo ello, este Baby-G x Ryan (un personaje de los Kakao, por cierto, aparecido en 2016 y que se destaca por su independencia..., ejem...) es un acierto más que trata de aprovechar el tirón para llevarlo al mundo de sus modelos de G-Shock/Baby-G, algo que tan bien saben hacer en Casio y que, desde casi siempre, tanto éxito les ha revertido.

'Déjà-Vu', una canción que nació bajo las estrellas y con un Casio MT-400v

La cantante francesa Requin Chagrin acaba de presentar su nueva canción que servirá de adelanto a su álbum de, previsiblemente, pronta aparición (que llevará el nombre, por cierto, de "Bye bye baby"). El corte, titulado 'Déjà-Vu', es un guiño al pop clásico, con profusión de instrumentación electrónica. Cuenta que la inspiración para componerla le llegó mientras estaba "jugueteando" con uno de los sintetizadores que más le encantan, el Casiotone MT-400v de Casio, un 15 de agosto en el que las estrellas fugaces iluminaban el cielo. De esos elementos quería impregnar su composición, con campos estelares y de fantasía.

La canción es fresca y electrizante, con ritmos vivos y joviales. Si te gusta la música techno te encantará. Puedes disfrutar de su videoclip oficial tras el salto.

El G-Shock falso que se vende en eBay y Amazon a 50 €

Ya hemos hablado en varias ocasiones respecto al riesgo que supone adquirir relojes por Internet en sitios no oficiales (de hecho, no olvides que Casio tiene su logotipo de distribuidor autorizado en aquellos sitios donde se venden relojes legítimos, que es, por cierto, este circulito que veis animado en algunas tiendas online). Pedro nos hacía mención a ello y nos lo advertía en la Galería Semanal, y como ha tenido además la gentileza de enviarnos las imágenes, os las ponemos para que podáis estar sobre aviso y evitar que os estafen.

Hay detalles, en efecto, que nos hacen dudar. El primero la etiqueta: "speed indicator" y "magnetic resistant" no pega ni con cola, menos aún en un digital de G-Shock (esos atributos son para analógicos). Tampoco detalles en el LCD o en el frontal, con las minúsculas letras en la parte inferior del mismo.