Galería semanal de relojes Casio (#12)

Bienvenidos una vez más a la Galería Semanal, en la cual -y viene siendo ya casi tónica habitual- encontramos muchos Collection, prueba evidente de que esos superventas de Casio siguen sin tener rival entre la población y son cada vez más y más populares. Ayer mismo, mientras acompañaba al supermercado a un señor, el cajero que nos atendía llevaba en su muñeca un B640. A su lado, su compañera en la otra caja llevaba un DB360. Y es que, si prestas atención, encontrarás Casio Collection por todos lados: en las personas más cercanas a ti, y en los desconocidos de tu barrio.

Costumbre habitual es que entre esos Collection destaquen bastante los AE-1200, un reloj que ha sido un acierto en Casio y al que siguen un ejército de incondicionales, muy activos también en las redes sociales.

Las "horrendas" falsificaciones de las ediciones "pop" de G-Shock

El mercado de los falsificadores de G-Shock no para quieto, y supongo que, entre otras cosas, mucha de la culpa la tiene la propia G-Shock, y me explico: las piezas para estos modelos son tan sumamente caras, y tan difíciles de encontrar, que siempre resulta tentador para no poca gente adquirir uno de estos "engendros" y quitarles bisel, o correa, o todo a la vez, y dejar su módulo preferido metido en ellos. Eso sin mencionar que se pueden hacer con piezas sin tener que romperse la cabeza ni lidiar con el SAT que, a la hora de la verdad, pasan de todo, ni te atiendan, y no quieren saber nada del reloj que acabas de estrenar (experiencia propia tengo de eso, y al final tuve que resolverlo por mis propios medios, ya lo conté en este mismo blog).

De manera que si a G-Shock ni le preocupa y hace la vista gorda a su red de servicios añadidos y de soporte, y cuando alguien necesita o quiere una pieza de esta tiene que pedirla a China o al mismo Japón arriesgándose a pagar unas altísimas tasas (y tener que soportar una larga espera), pues muchos directamente optan por pasar al mercado de las falsificaciones, adquirir por "cuatro centavos" un reloj de éstos, y además de tener que pagar poco en aduanas, no se preocupan si les llega bien o no, porque saben que del reloj no se pueden esperar mucho.

¿Qué pasaría con este blog ante la nueva ley de Internet?

La nueva normativa europea de copyright continúa imparable su proceso de aprobación. Si éste sale adelante, blogs como el que estás viendo (y similares) no tendrían ningún sentido: cualquier enlace a páginas de Casio, incluso para publicitar sus propios productos, y cualquier imagen que de Casio publiquemos, tendrían que ser previamente autorizadas directamente y por escrito por la marca. Algo que, a todas luces, haría imposible nuestro trabajo. Posts de notable éxito, como el de la galería semanal no se podrían publicar.

Supongo que, en nuestro caso, nos centraríamos en Gaceta59, y a menos que Casio nos hiciera su blog oficial expresamente (cosa que será difícil que ocurra, por no decir imposible), ZonaCasio como tal desaparecería. Porque ni en Gaceta59 podríamos poner noticias de actualidad: poco sentido tendría hablar de un nuevo GA-110, colocando de imagen un W-59 nuestro, propio, y con fotos propias. Sería kafkiano.

Una historia de amor contada en una vieja fotografía

Mientras rebuscaba entre viejas fotos para el post de la Wikipedia del otro día, me di de bruces con una curiosa imagen de un chico que conozco en una comida con su familia en Barcelona. El caso es que en esa imagen se identificaba muy claramente el reloj que llevaba en su muñeca e, indudablemente, era un Casio.

Han transcurrido mucho tiempo, unos treinta años de todo aquello, tantos que esta persona ni se acordaba. Nuestra conversación fue más o menos así:
- ¿Recuerdas un reloj digital que tenías cuando eras niño?
- Mmm... No. ¿Un Citizen?
- No. Un Casio.
- No recuerdo haber tenido un digital de Casio de niño...
- Uno rojo y amarillo...

Película sobre relojes: "El ángel en el reloj"

Tras nuestra recomendación de radio creo que os resultará sumamente interesante nuestra recomendación de película, y en este caso además con una producción mexicana que lleva por título: "El ángel en el reloj".

Amelia es una niña enferma de cáncer que tiene una extraña fijación con los relojes: le encanta detenerlos, quitarles las pilas y alterar sus manecillas. Quiere a toda costa detener el tiempo, hacer que las cosas no envejezcan, ni se estropeen, ni se rompan.